La calificadora de riesgo Standard & Poor’s Ratings mantuvo las calificaciones a Costa Rica y, por lo tanto, el país continúa, con esta agencia, en grado especulativo.
La firma mantuvo la calificación “BB” para la deuda a largo plazo extranjera y “B” para la de corto plazo extranjera.
La agencia mantuvo estable la perspectiva.
La calificación mide la opinión actual sobre la capacidad de pago del Gobierno, y la perspectiva evalúa la dirección potencial de dicha calificación.
La calificación “BB” significa que el país “es menos vulnerable, en el corto plazo, que otros emisores con calificaciones más bajas. Sin embargo, enfrenta constante incertidumbre y exposiciones ante situaciones financieras, económicas o comerciales adversas, que podrían generar una inadecuada capacidad para enfrentar sus obligaciones financieras”.
La “B” indica mayor vulnerabilidad que la calificación anterior, pero normalmente existe capacidad para enfrentar las obligaciones financieras.
Ambas pertenecen al grado especulativo, en el cual tienen limitaciones para invertir algunos fondos de países desarrollados.
En setiembre pasado, otra agencia, Moody’s , elevó al país a grado de inversión, donde pueden invertir estos fondos.
Standard & Poor's considera que el crecimiento económico podría llegar al 5%, en el 2011.