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Turistas que arribaron ayer al aeropuerto Daniel Oduber, en Liberia, Guanacaste. Durante este año, los ingresos por turismo se han recuperado un poco de la caída que registraron durante la crisis. | INGRID MORALES. (INGRID MORALES / GNN)
Los ingresos de divisas al país por turismo se desaceleran y por inversión extranjera directa registraron una leve baja en el tercer trimestre de este año con respecto al mismo período del 2009.
Así lo reflejan los resultados de la balanza de pagos al tercer trimestre del año que publicó ayer el Banco Central.
Las entradas por turismo sumaron casi $478 millones entre julio, agosto y setiembre del 2010, un 13% más que en el mismo período del año anterior.
El 13% es un poco menor que el resultado del segundo trimestre del año respecto al mismo período del año anterior, que fue de 15%, y del primero, que alcanzó un 21%.
Desde el último trimestre del 2008 y durante todo el 2009, la actividad turística decayó por efecto de la crisis.
En el rubro “viajes” de la parte de créditos de la balanza de pagos se contabilizan los recursos que ingresan al país por los bienes y servicios que los viajeros adquieren aquí por su estancia en un período menor que un año.
Por su parte, los ingresos de dólares por inversión extranjera directa alcanzaron $335 millones en el tercer trimestre del año, una reducción de 7% respecto al mismo período del año anterior.
Esta inversión había registrado una leve recuperación en los dos trimestres anteriores, luego de la reducción que sufrió con la crisis.
La inversión extranjera directa incluye empresas nuevas que vienen al país, ampliación de operaciones de las firmas foráneas que ya operan en suelo nacional o compras de firmas o propiedades locales, entre otros.
El turismo y la inversión extranjera directa son las dos principales fuentes de ingresos de divisas del país, después de las exportaciones.
Este déficit surge cuando los gastos de Costa Rica en el exterior por bienes y servicios, principalmente, superan a los ingresos.
No obstante, el Banco Central espera que, durante el año, dichos ingresos cubran ese déficit.
En los primeros tres trimestres de este año, los ingresos por inversión extranjera sumaron $1.015 millones, y el déficit alcanzó los $918 millones.
Cuando los ingresos por inversión extranjera directa cubren el déficit, se considera un financiamiento sano pues los recursos de la inversión no se van fácilmente del país, en comparación con la inversión financiera.
