EscucharEl Día del Amor y de la Amistad, o San Valentín, es una de las fechas en las que el consumo aumenta debido a los regalos. En esta festividad destacan los osos de peluche, los chocolates y, por supuesto, los arreglos florales. Sin embargo, este año la celebración tiene una particularidad y es la caída en el precio del dólar, lo que preocupa a exportadores de flores.
La apreciación del colón preocupa al sector exportador, y en el caso de los floricultores, algunos ya empezaron a tomar medidas para enfrentar la afectación que esto puede causar. Otros están a la espera de que pase la temporada alta de ventas por San Valentín para analizar qué medidas tomar. Entre ellas evalúan el recorte de horas o despidos de empleados, reducción en el área de siembra y una desaceleración en las inversiones que podrían hacer crecer el negocio.
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Los productores de flores mencionaron que tanto el Día de San Valentín como el Día de la Madre son las dos fechas donde más se intensifican las ventas de estos artículos. Fotografía de archivo: Gabriela Téllez. (Gabriela Téllez)
Así lo mencionaron algunos floricultores consultados por La Nación, quienes explicaron que las fechas de celebración de San Valentín y Día de la Madre son dos picos altos de venta dentro de sus calendarios. Sin embargo, estas fechas ya están presupuestadas, por lo que los ingresos generados en estas celebraciones no permiten reponerse de la afectación que han vivido ante la caída en el precio del dólar.
Sergio Madrigal, secretario de la Cámara de Plantas, Flores y Follajes de Costa Rica, explicó que ambas fechas “son un ingreso extra”, pero que ya está contemplada en la planificación de las empresas que hacen anualmente. Además, amplió que la prioridad de estas compañías exportadoras, más que aprovechar los picos altos de ventas, es mantener buenos números todas las semanas.
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Algo similar mencionó María Andrea Solís, gerente general de la empresa exportadora de flores Río Tapezco, quien mencionó que el funcionamiento y la producción que realiza la compañía se planifica con un año de anticipación bajo ciertas condiciones de mercado.
Madrigal reveló que tras la pandemia, la caída en el tipo de cambio ha sido la afectación más dura que han tenido los floricultores. Afirmó que incluso un crecimiento del 20% en sus ventas en comparación con el año anterior se tornó imperceptible debido la apreciación del colón.
“La alegría del San Valentín se nos fue con el tipo de cambio, cualquier extra que ganábamos lo perdimos por la caída del dólar”.
— Sergio Madrigal, secretario de la Cámara de Plantas, Flores y Follajes de Costa Rica
El floricultor mencionó que esta afectación la ha visto de forma inmediata en su empresa, pues todas las semanas tiene que cambiar más dólares para recibir los mismos colones con los que paga su planilla.
Además, Madrigal explicó que la caída en el valor del dólar genera una pérdida en la competitividad de Costa Rica. Andrea Solís coincidió en que las empresas nacionales están en desventaja en comparación con otras de la región, pues además del fenómeno cambiario, las tarifas aéreas y las cargas sociales en países como Colombia o Perú son menores. Esto hace que sus precios sean mucho más baratos y más apetecidos por los compradores.
Analizan medidas
Según el secretario de la Cámara de Plantas, Flores y Follajes de Costa Rica, algunas empresas exportadoras han empezado a hacer recortes en la cantidad de colaboradores y de horas de trabajo, con el fin de reducir sus costos de producción.
Por otro lado, Solís amplió que varios floricultores se encuentran “con mucha ansiedad”, y están a la espera de que pase la época de San Valentín para analizar algunas posibles medidas que podrían tomar, de mantenerse el comportamiento en el tipo de cambio.
Según explicó, en el sector también se analiza una posible reducción del área de siembra (lo que podría afectar los volúmenes de producción y exportación), y limitar las inversiones tendientes a crecer.
Tendencia a la baja
Este martes 14 de febrero el precio promedio del dólar en el Mercado de Monedas Extranjeras (Monex) se posicionó en ¢568,83, una reducción de ¢4,86 en un día. Esto quiere decir que la divisa es 11,22% más barata de lo que era hace un año. Si lo comparamos con el valor de la moneda del pasado 21 de junio, cuando se ubicó en su pico más alto de la historia (¢696,76); hoy su precio es 18,36% menor.
Desde el mes de junio del 2022, el dólar presentó una tendencia a la baja, la cuál se intensificó aún más en enero. Los primeros 29 días del mes pasado, el valor del dólar cayó ¢42,22; pero entre el 30 de enero y hasta el 7 de febrero del 2023 el precio de la moneda hizo una pausa en su caída, y alcanzó los ¢585,64. Desde ese día, la divisa ha vuelto a bajar hasta la fecha.
En enero, cuando la apreciación del colón se aceleró, Róger Madrigal, presidente del Banco Central, explicó que la caída en el precio del dólar se dio por el aumento en la oferta de dólares debido a la temporada alta de turismo y por el incremento de la inversión directa del país; sumado a una menor demanda por parte de las operadoras de pensiones y del sector público.
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