La Dirección General de Tributación valora publicar una interpretación en la cual permitiría a las personas físicas con actividad lucrativa que los gastos en salud sean deducibles del impuesto sobre la renta.
Las personas físicas con actividades pueden ser profesionales liberales, por ejemplo.
El objetivo es incentivar a las personas a pedir la factura a los profesionales de la salud y por este medio obtener más información sobre los ingresos que reciben estos profesionales y poder así evitar la evasión del impuesto sobre la renta.
Según un estudio de la Contraloría General de la República, publicado en noviembre pasado, en medicina y odontología un 55% de los contribuyentes no reportaron impuesto, mientras que un 89% declararon ¢49.944 de tributo, en promedio, en el 2010.
Es posible. El abogado Alan Saborío opinó que la medida es legalmente factible. Señaló que a un profesional, por ejemplo, se le permite depreciar los activos que usa para generar la renta y “¿cuál es el mayor activo de un profesional? él mismo”, señaló.
“Me parece correcto que se consideren deducibles”, aseveró el abogado Diego Salto.