São Paulo. Considerado como el nuevo sabor amargo de la crisis de la deuda en la Unión Europea, España registró una salida masiva de capitales de poco más de $80.000 millones en marzo, informó el Banco Central del país ibérico.
De acuerdo con el diario El País , este valor es casi el doble del récord anterior registrado en diciembre el 2011, cuando se reportó una salida de recursos de $50.000 millones.
Desde julio del año pasado hasta marzo de este año más de $200.000 millones abandonaron el país, de los cuales más de $100.000 millones lo hicieron en el primer trimestre de este año.
El rotativo recuerda que ese movimiento puede repetirse en el actual trimestre (abril, mayo y junio), si se tiene en cuenta el pésimo desempeño de la Bolsa de Madrid. Su principal índice, el Ibex, cerró mayo con una caída del 13,14%.
El País resaltó , empero, que justo después de que el Banco Central diera a conocer esos datos será posible conocer si esos retiros corresponden a dineros de españoles o de extranjeros.
El ministro de Economía español, Luis de Guindos, entre tanto, negó este fin de semana, que el país esté enfrentando una fuga de capitales.
“No hay una salida de capitales. Lo que ocurre es que los bancos españoles tienen dificultades de acceso a los mercados monetarios”, afirmó durante un encuentro con empresarios, en Barcelona.
Panorama oscuro. Otro dato que salió a la luz pública la semana pasada fue sobre la fuga de depósitos bancarios.
Los recursos de las personas físicas y empresas no financieras depositados en los bancos españoles sufrieron en abril la segunda mayor caída de la serie iniciada por el Banco Central Europeo (BCE) en 1997.
Los depósitos se redujeron en más de $40.000 millones. Ese volumen, sin embargo, es menor que los más de $45.000 millones retirados en enero del 2010.
El FMI niega que ya esté analizando ayudar a España. Traducción por Sergio Arce A.