Kansas City. Al parecer tocados por una varita mágica, Reales y Gigantes dirimen una Serie Mundial entre dos equipos que se clasificaron a la postemporada como comodines, que tienen la tendencia de definir sus juegos en los últimos innings y que no necesitan fabricar muchas carreras para ganar.
También están flechados con asombrosas rachas de triunfos, como si estuviesen vacunados para no perder en octubre.
Después de 29 años de ausencia, los Reales vuelven a un Clásico de Otoño y desde hoy serán locales de los dos primeros juegos en el estadio Kauffman, de Kansas City.
Los Reales son el primer equipo en la historia que arranca una postemporada con foja de 8-0. Además, ganaron los últimos tres juegos del clásico de 1985, en el que se consagraron viniendo de atrás frente a San Luis, por lo que acumulan 11 victorias consecutivas en play-off , y con una más igualarán el récord de todos los tiempos.
En la otra acera se encuentran los Gigantes, un equipo que se ilumina cuando se trata de un año par. Campeones en 2010 y 2012, San Francisco puede calzarse la etiqueta de dinastía. El último equipo que alcanzó esa categoría son los Yanquis de Nueva York, que entre 1996 y 2001 ganaron cuatro campeonatos en cinco Clásicos de Otoño.
Con Pablo Sandoval y Buster Posey como abanderados, los Gigantes ganaron sus últimas ocho series de postemporada, además del juego de comodines ante Piratas.
Tensión. Prepárense para juegos en los que morderse las uñas e irse a dormir tarde es inevitable.
Kansas City lleva cuatro juegos que se fueron a extrainnings y cinco de sus victorias se certificaron en su última oportunidad al bate.
San Francisco no se queda atrás, con un par de extrainnings —incluyendo uno que se fue a 18 episodios para ser el más largo de la historia en una postemporada— y suman tres triunfos en su último turno.
Esta es la segunda vez que dos comodines se topan por el campeonato; la otra fue en 2002 y también contó con los Gigantes, que cayeron en siete partidos ante Ángeles.
Madison Bumgarner abrirá por San Francisco en el primer juego contra James Shields, un duelo entre mandamases de cada rotación.
El zurdo, que en su carrera solo recibió tres votos de Cy Young, exhibe efectividad de 1.42 en cuatro aperturas esta postemporada, cubriendo siete innings en todas.
Shields es de los escasos Reales con experiencia en Serie Mundial. No estuvo fino en estos play- off , con efectividad de 5.63 en tres aperturas, tolerando cuatro carreras en cinco entradas en dos ocasiones.
Durante la campaña, los Reales recibieron a Gigantes en una serie interligas en la que barrieron y Shields tiró una blanqueada.