La liga española dejó de ser un pleito entre dos luego de cinco temporadas

Barcelona y Real Madrid. Real Madrid y Barcelona. Póngalos en el orden que desee. El punto es que esa fue la fórmula que le recetó la liga española al planeta en las últimas cinco temporadas.

No obstante, ya no más. Hoy el Atlético de Madrid está en la pelea, abriendo el selecto grupo de candidatos de dos a tres, más allá de que se llevó un golpe el fin de semana al perder contra Almería (0-2).

De hecho, esa derrota colchonera permitió que los tres poderosos clubes, los cuales también están en carrera en las semifinales de la Copa del Rey y en los octavos de final de la Champions , estén igualados en la cima con 57 unidades, cuando transcurre la fecha 23 (la liga tiene 38 partidos por equipo).

El especialista en estadísticas de fútbol Mister Chip dijo ayer, por medio de su cuenta de Twitter , que la punta la compartan tres equipos con el certamen tan avanzado no sucede desde la jornada 24 de la campaña 1992-1993. En aquella ocasión luchaban catalanes, merengues y el Deportivo La Coruña.

Además, fue en la ya temporada 2007-2008, cuando irrumpió el Villarreal en la escena, la última vez que alguien amenaza la hegemonía de los dos grandes de España.

El Submarino Amarillo terminó segundo en la tabla de posiciones, detrás de Real Madrid. Barcelona tuvo que resignarse con el último escalón del podio.

Sin embargo, ojo lo que le costó al Villarreal meterse entre el bloque: tuvo crisis económica y cuatro años después se fue a Segunda.

Demasiada diferencia. En las temporadas posteriores, la diferencia que se hizo entre azulgranas y blancos con quien fuese el que peleara el tercer puesto, era demasiada. Casi injusta. Lo suficiente como para que se dijera que en España había dos campeonatos: el del cetro y el que jugaban los otros 18 clubes.

Por ejemplo, en 2008-2009 Sevilla acabó tercero, 17 puntos abajo de Barcelona y ocho de Real Madrid. Y ese fue el año más competitivo.

En 2009-2010 fue Valencia, pero a la abismal distancia de 28 puntos atrás del equipo que dirigía Josep Guardiola y a 25 del que entrenaba el chileno Mauricio Pellegrini.

El escenario fue similar en 2010-2011: Valencia quedó atrás 25 puntos del Barça y 21 del Madrid.

No obstante, nada se compararía con 2011-2012, donde una vez más los valencianistas “ganarían su torneo”, para quedar a 29 de los merengues y a 20 de catalanes.

Ya la temporada anterior, la del 2012-2013, apareció Atlético de Madrid, aunque de igual manera quedó a 24 puntos de Barcelona. Eso sí, la diferencia con sus vecinos fue “solamente” de nueve puntos.