“Me da una pena enorme porque tenía ganas de demostrar por qué Borghi y la gente de Boca se fijaron en mí. Estoy triste, porque no hay ningún problema como para que yo no pueda estar en Boca”, expresó Fierro el martes en diálogo con el canal TyC Sports .
Fierro había llegado a préstamo procedente del Flamengo de Brasil por pedido de Borghi, quien lo había dirigido en el Colo Colo de Chile y lo consideraba el indicado para ocupar el puesto de volante por derecha.
En los exámenes médicos de rutina se detectó el inconveniente en su ojo derecho y Boca desistió de contratarlo. Pero el propio Fierro ofreció conseguir una póliza que proteja al club argentino en caso de sufrir algún inconveniente.
“Les dije que yo me hacía responsable si me pasaba algo en el ojo. No les iba a hacer juicio, pero la gente de Boca no lo entendió así”, explicó Fierro, quien integró el plantel mundialista de Chile en Sudáfrica.
Al parecer la directiva de Boca no quedó conforme con el seguro presentado por Fierro.
Borghi dijo el lunes que sin Fierro se arreglaba con jugadores del plantel boquense, descartando las versiones sobre un interés en el también chileno Alvaro Ormeño, actualmente en condición de libre tras desvincularse de Gimnasia.
Respecto a su futuro, Fierro advirtió, “esto no se acaba acá y debo volver a Flamengo para ver qué pasa allá. Corro un riesgo en seguir jugando, pero lo voy a seguir haciendo. Quiero seguir mi carrera por mucho tiempo más”.
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