El empate 1-1 fue el fiel reflejo de lo intrascendental del duelo entre Saprissa y Cartaginés , un pulso cargado de variantes entre dos equipos que tienen la cabeza puesta una semana en el futuro.
Morados y brumosos llegaron a Tibás con equipos alternativos, los primeros porque eso es todo lo que tienen y los segundos porque su realidad se los permitía.
Y entonces toda esa trivialidad potenció el ensayo y diezmó el espectáculo, dejándole a la feligresía un partido de altibajos, cargado de imperfecciones y errática puntería que muy de vez en cuando alcanzó el furor de la aproximación.
Javier Delgado aprovechó esa firmeza en el cuarto lugar para abrirle las puertas a los menos habituales, un puñado de sus piezas menos regulares que tuvieron ayer un último chance por demostrar algo que los metiera en los planes de las semifinales.
Rónald González, en cambio, tenía en sus manos la lejana oportunidad de subirse con los suyos a la segunda casilla de la general, pero como siempre su hospital le dejó un reducido abanico de posibilidades.
Por eso mucho de lo poco que el saprissismo se llevó a su casa ayer pasó por lo que hizo Marvin Loría, un pícaro estudiante de noveno año, que con 16 años ya puede decir que debutó en la Primera División.
También se pudo reafirmar otras premisas menos alentadoras, como que sin el aporte de los titulares es prácticamente imposible sacar a Alajuelense de la carrera por el título del Torneo de Invierno.
Carencias. Difícilmente alguien podrá inferir en que ayer Saprissa consiguió sin mucho apuro quitarle el balón al Cartaginés durante una buena parte del cotejo.
El problema para la S fue lo que venía después, el entender qué hacer con la pelota en las piernas y cómo labrarse un camino hacia la portería del rival.
Pero más grave aún fue el “cerrar la pinza”, definir esas opciones que hombres como Diego Estrada, Josué Martínez o Deyver Vega (demasiado flojo ayer) tuvieron para revertir la historia.
Por eso la anotación de Martínez al 33’ y el empate de altísima factura de Eduardo Valverde al 39’ condenaron a la afición a vivir del recuerdo de esos dos goles durante todo el complemento.
Cartaginés, menos punzante pero más calculador, alabó las ganas de Rodrigo Garita y Pablo Herrera pero se quedó con eso, pues aparte de un balón al palo y una clara llegada de Herrera, tuvo poco qué lamentar de cara al marcador final.
Entonces el choque en el Ricardo Saprissa saldó un empate que en el discurso dejó satisfechos a los dos bandos pero en la práctica tiene que traer preocupación, por lo menos en el cuadro local.
Primero porque en las semifinales ningún rival va a llevarle las facilidades del ensayo, segundo porque Alajuelense reafirmó en el sur su buen estado de forma.
De ahí viene la necesidad de recuperar sus bajas, porque en ellos descansa la ilusión del cambio que el equipo, sin duda, requiere.
Saprissa 1-Cartaginés 1
Saprissa: Donny Grant 6, Jordan Smith 6, Alexánder Robinson 6, Douglas Sequeira 6, Michael Barquero 6, Manfred Russell 7, David Guzmán 6, Mauricio Castillo 6, Marvin Loría 6, Deyver Vega 5 y Josué Martínez 6. D. T.: Rónald González.Cambios: Diego Estrada 6 (Loría, al 63’); Michael Umaña 6 (Robinson, al 68’) y Juan Bustos Golobio - (Castillo, al 78’).
Cartaginés: Luis Torres 6, Diego Ramírez 6, Andrés Sanabria 5, William Fernández 5, Kevin Vega 6, Randall Alvarado 6, Félix Montoya 6, Eduardo Valverde 7, Rodrigo Garita 7, Pablo Herrera 6 y Eric Scott 5. D. T.: Javier Delgado.Cambios: Leandro Silva 6 (Montoya, al 57’); Bryan López 6 (Valverde, al 69’) y Giovanni Clunie - (Scott, al 85’).
Goles: 1-0 (33'): Josué Martínez asistido por Michael Barquero. 1-1 (39'): Eduardo Valverde tras un cobro de tiro libre. Árbitro: Pedro Navarro 6, con Mauricio Córdoba y Juan Sánchez. Estadio: Ricardo Saprissa. 3 p. m.