San isidro de El General. Los guerreros del sur mostraron ayer que también en los momentos más adversos se pueden cosechar grandes victorias.
Con solo nueve hombres en la cancha, los generaleños consiguieron un indiscutible triunfo ante un incoherente y débil Herediano, con un marcador final de dos a cero.
Las expulsiones de Néstor y Juan Diego Monge forzaron a los pupilos de Daniel Casas a mostrar su cara más aguerrida para volcar la balanza y conseguir una victoria que los consolida en la segunda posición de la tabla del Verano.
En el otro lado, parece que los florenses aún no plasman las ideas de su novel estratega, Mauricio Solís, en el terreno de juego.
Solo siete puntos en seis juegos; los heredianos no son ni la sombra del aguerrido y tenaz equipo de la temporada anterior.
Rojas por goles. Corría apenas el minuto 14 del encuentro cuando el local Juan Diego Monge salió expulsado, tras acumular dos amarillas en menos de un minuto.
No obstante, Pérez no perdió el ritmo del partido, esto gracias al enorme sacrificio que hicieron Néstor Monge y Ariel Rodríguez, dos legítimos volantes de infantería, que se multiplicaron para cortar el juego herediano.
Cuando el reloj marcaba el minuto 30, llegó un tiro libre para Pérez. Cobró Camilo Aguirre para buscar la cabeza de su delantero en punta, Luciano Bostal, quien superó su marca y mandó el balón al ángulo superior izquierdo, imposible para Daniel Cambronero.
Tras la conquista generaleña, comenzó la desarticulación del juego florense, con jugadas que no generaban espacios y pases que nunca llegaban al delantero.
Un tiro de esquina de los guerreros del sur terminó, literalmente, en las manos de Yendrick Ruiz: penal para los locales.
Con serenidad, el capitán de la brigada generaleña, Keilor Soto, cobró desde los 11 pasos para aumentar la ventaja al 66’.
Como dicta la lógica, Solís metió a toda la artillería para buscar el descuento. Entró Ismael Gómez, Jorge la Flecha Barbosa y Olman Vargas, tres hombres con vocación ofensiva que nunca le tomaron el ritmo al encuentro.
Al minuto 80, Néstor Monge fue expulsado tras propinarle un codazo a Elías Aguilar, pero para ese momento el juego era propiedad solo un equipo: para los guerreros.