Ocho adolescentes y preadolescentes, con edades entre los 10 y los 18 años, tenían problemas de circulación sanguínea debido a lo estrecho de las arterias; esto, porque porciones muy delgadas dificultaban el paso de la sangre por lugares clave, como el corazón o los pulmones.
Esta situación hacía que se les dificultara la respiración y realizar actividades cotidianas, como correr, subir escaleras o hacer deporte.
Especialistas del Hospital Nacional de Niños (HNN) y de la fundación estadounidense Mending Kids encontraron solución para este problema, con una intervención que no requiere una cirugía y permite al joven estar en su casa en 24 horas.
Este procedimiento es parte de las técnicas de cardiología intervencional, que se caracterizan porque no se necesita una cirugía a corazón abierto para tratar el padecimiento.
En este caso, el proceso se llama cateterismo, que consiste en introducir un catéter (dispositivo similar a una manguera) por la arteria de la pierna que va directo al corazón.
A través del catéter se mete un tubo diminuto llamado estent, que abre la arteria y permite el paso normal de la sangre.
“Esto evita hacer intervenciones más complejas. Con esto, los niños están en la casa en cuestión de 24 horas”, comentó Lydiana Ávila, jefa del Departamento de Medicina del HNN.
Esta no es la primera vez que se ejecuta este procedimiento en el centro médico, pero lo costoso del tratamiento impide su realización frecuente.
Isabelle Fox, de la Fundación Mending Kids, indicó que los suministros para cada intervención tienen un costo aproximado de $3.000 (más de ¢1,5 millones) y se obtuvieron gracias a aportes de diferentes organizaciones, como la Fundación Pro-Hospital de Niños, el Club Rotario y donadores privados.
Olga Arguedas, directora del HNN, comentó que con esta misión internacional se ayuda a alivianar las listas de espera.
Actualmente, hay 16 menores a la espera de la colocación de estents, 30 que requieren ablaciones para el tratamiento de arritmias (latidos anormales del corazón) y 103 pacientes necesitados de cierres de comunicación interauricular; es decir, que urgen clausurar el paso entre las dos cámaras superiores del corazón, pues están “abiertas”.