La Arquidiócesis de San José anunció este sábado el cambio de presbíteros responsables de 11 parroquias de San José y Heredia, a partir de este mes.
Entre los reubicados figuran dos curas de Tibás, dos de Desamparados y otros de zonas rurales como La Gloria de Puriscal y Vuelta de Jorco de Aserrí.
Además, fueron trasladados 14 vicarios parroquiales, sacerdotes que ayudan a los párrocos en comunidades grandes.
Los cambios, dictados por el arzobispo metropolitano, José Rafael Quirós, rigen a partir de este mes, por lo que para el primer domingo de Adviento (29 de noviembre) se espera que ya los 25 sacerdotes estén en sus nuevas sedes para emprender el nuevo año litúrgico.
El párroco de Tibás, Jorge Roberto Salazar, de 50 años, iba a cumplir en enero 13 años en la localidad. Ahora deberá servir en Santa Ana.
Según dijo, la fe es obediencia y hay que ver en las disposiciones del obispo la voluntad de Dios. Sostuvo que los curas tienen diversos carismas con los que van ayudando a las comunidades que sirven; pero todo tiene un límite y por eso la tradición de la Iglesia acostumbra los cambios periódicos.
Salazar estimó que los más importante de su labor en San Juan de Tibás fue integrar la comunidad, tener una parroquia de puertas abiertas y atender las necesidades de fieles.
En el ámbito material le tocó la restauración total de templo.