Compartir, ayudar y promover la lectura son algunos de los objetivos de la liberación de libros, una idea mundial que volverá a disfrutarse el viernes 21 de junio en varios países, entre ellos Costa Rica.
Una vez más el perfil de El Club de los Libros Perdidos en Facebook está impulsando este movimiento, el cual está respaldado en nuestro país por el Ministerio de Educación Pública (MEP) y universidades.
¿En qué consiste? La idea es perder un libro voluntariamente y especificar en la primera página que dicho texto forma parte de la liberación. Lo ideal, además, será escribir la ciudad y la fecha en la que se ha liberado, para que quien lo encuentre esté enterado de que ese libro deberá seguir rodando y así saber por dónde ha rodado el ejemplar.
En el marco de esta, la cuarta liberación mundial de textos, un grupo de estudiantes de la Universidad de Costa Rica y de la Ulacit estarán el viernes en la Plaza de la Cultura compartiendo libros.
Según Carlos Díaz, escritor costarricense y profesor de la UCR que promueve la actividad, se hará “un tipo de tendedero para colocar o guindar las obras en algún árbol emulando sus frutos”.
En dicha iniciativa estudiantil se liberarán 80 ejemplares de diversas temáticas, entre ellos La otra mitad de mi diferencia , De panorama en panorama y Aguas en celo , tres libros de Díaz. “Como escritor me place abandonar mis libros y ver que alguien se interese en llevárselos pues, de esta manera, la trasmisión del mensaje y el sentimiento plasmados en ellos se va extendiendo a una mayor cantidad de personas, lo cual los recrea constantemente”, explicó el autor al respecto.
Asimismo, la Plaza Real Cariari informó, por medio de un comunicado de prensa, que se unirá, de nuevo, a este movimiento mundial.
“En la pasada liberación -21 de marzo- tuvimos una gran respuesta de la gente que vino a sembrar sus libros en los distintos pisos del Centro Comercial y que además disfrutó de la sorpresa de encontrarse un libro perdido con un texto que invitaba a llevárselo y ser parte de esta dinámica mundial”, explicó Ivannia Fumero, gerente general de ese mall, que está ubicado en el cruce de San Antonio de Belén, Heredia.
Participación ciudadana. Leonardo Garnier , ministro de Educación Pública, quien es otro propulsor de la distribución voluntaria de textos, comentó que la participación ciudadana es sumamente importante para lograr el alcance que se pretende con esta iniciativa.
“Tanto yo en lo personal, como asesores de español y de la Dirección Curricular, estamos participando vía redes sociales en promover la participación de la ciudadanía en esta iniciativa. Esto es parte de los distintos esfuerzos que desarrollamos desde el MEP para promover y estimular el gusto por la lectura y el acceso a los libros”, afirmó Garnier.
En la liberación anterior, realizada el 21 de marzo , varias empresas se sumaron a la actividad, entre ellas Grupo Nación y la Embajada de Estados Unidos en Costa Rica; sin embargo, Garnier destacó la importancia de estimular la participación individual.
“La idea es que esta sea una iniciativa principalmente personal y nuestro papel es el de estimular esa participación, aunque sí hay empresas que se suman al esfuerzo liberando libros por su cuenta, lo que me parece positivo”, añadió Garnier.
Recuerde: un autobús, un parque, un bar, un museo, un restaurante o cualquier sitio público será un buen escenario para compartir textos, o bien, para encontrarlos este próximo 21 de junio.