Cuando Teresa Mendoza nació corría la década de los años ochenta. Culiacán, estado de Sinaloa, en México, su tierra natal, era territorio de cambistas, narcotraficantes y policías corruptos, capaces de matar a quien fuera con tal de controlar el tráfico de cocaína entre Estados Unidos y Colombia.
Ella creció escuchando los famosos narcocorridos, con los que los mariachis mexicanos contaban las aventuras de los duros del narcotráfico, para quienes, por ese entonces, ser la musa de tales prosas era todo un privilegio.
Fue años después, cuando tenía 23 años, que Teresa conoció al Guero Dávila, un piloto de aviación y pequeño narcotraficante, que se hizo su novio y quien, inconscientemente, la convertiría en quien es: la Reina del sur.
Será hoy, a las 10 p. m., por canal 7, cuando se comiencen a revelar los entretelones de la vida de la mujer más dura del narcotráfico del sur de España, en la telenovela La reina del sur.
Con la interpretación de la actriz mexicana Kate del Castillo, quien regresa así a las telenovelas, y con un elenco compuesto por actores de la talla de Humberto Zurita, Rafael Amaya e Iván Sánchez, llega a la pantalla chica la sonada producción que Telemundo grabó en colaboración con el canal español Antena 3 .
Esta narconovela es una adaptación de la novela homónima del escritor español Arturo Pérez -Reverte quien, a su vez, se inspiró en el narcocorrido Camelia la Texana , de Los Tigres de Norte, agrupación mexicana pionera en tocar con sus letras temas sobre el narcotráfico.
Por cierto, fue a raíz de la obra literaria de Pérez-Reverte que los Tigres del Norte grabaron La reina del sur , que hoy es el tema principal de la producción.
Costosa. La reina del sur se ha convertido en una de los rodajes más caros de Telemundo, ha dicho la misma cadena hispana.
Realizada entre EE. UU., España, México y Colombia, en tecnología de alta definición, Telemundo desembolsó por cada capítulo, aproximadamente, $100.000, según cifras suministradas por el Diario Sur, de Málaga, en España.
Pese al alto presupuesto que supuso el proyecto, con su estreno, en Estados Unidos, Telemundo comenzó a percibirlos réditos de tal inversión monetaria.
Desde su debut, en febrero, la cadena registró audiencias de 2,4 millones de espectadores, publicó en ese momento Telemundo.
Una semana después de su estreno, las cifras de rating aumentaron. Según Nielsen Media Research, firma encargada de medir audiencia en Estados Unidos, La reina del sur subió en audiencia a 3,1 millones de espectadores.
Fue gracias al éxito que generó la telenovela, que sus productores decidieron incluir nuevas escenas. El libreto de estas fue supervisado y aprobado por el mismo Pérez-Reverte, informó Televisa.
Regreso de la ‘reina’. Interpretar a una mujer ruda, curtida por los fierros y la dureza de un mundo gobernado por hombres, fue el papel fuerte que Kate del Castillo estaba esperando para regresar a las telenovelas.
“Me siento muy contenta y me da gusto que agarré el proyecto que tenía que haber agarrado para poder volver a la televisión. No quería regresar con algo que no fuera superfuerte y, además, muy diferente, con un personaje con el que nunca me han visto en la televisión”, ha dicho la actriz al diario mexicano El Universal.
Para darle vida a este personaje, la mexicana comenta que no tuvo mucho tiempo para prepararse, pero que echó mano del Internet para empaparse más, al tiempo que se leyó el libro de Pérez-Reverte.
Parte de esa preparación, antes de salir a rodar, fueron unos pocos correos que sostuvo con el escritor, quien le dio consejos. Sin embargo, al final de la producción, el español ha dicho que se siente complacido por la interpretación que hace de su personaje la mexicana.
“(Teresa) Es una mujer que comienza como una mujer ordinaria, común y corriente y, además, inocente. Es una chava que se enamora de la persona equivocada y eso la lleva a ser quien es, para bien o para mal”, comenta la artista sobre su personaje.
“Para mi gusto, es una historia de amor que termina mal; el amor, constantemente en su vida, la va llevando (a Teresa) a un camino que ella no quiere, pero que tiene que tomar decisiones entre eso o la muerte. Es la historia de una mujer que sobrevive y que va sobreviviendo y se va levantando después de cada tragedia que le sucede a causa del amor”, reflexiona.
“( La reina del sur ) Es una telenovela que está teniendo gran éxito, lo veo en las redes sociales, en los números, pero, sobre todo, en la reacción de la gente en la calle, eso me llena de orgullo”, comentó del Castillo al rotativo.
Huida. Tras la muerte del Guero –la cual promete vengar–, Teresa huye de su natal Culiacán, pues son muchos los secretos que conoce y teme por su vida.
Es así como con llega a España. Allí conoce a un pequeño contrabandista gallego, Santiago Fisterra, con quien se relaciona sentimental y laboralmente, administrando su negocio ilícito.
Tras una de sus andanzas, Fisterra muere y la mexicana va a parar a la cárcel del Puerto de Santa María, donde conoce a la teniente O’Neill. Con ella, Teresa mantendrá una relación lésbica.
Cuando ambas salen de prisión comienzan un negocio de trasiego de drogas por el estrecho de Gibraltar –sitio donde se unen dos masas de agua: el mar Mediterráneo y el océano Atlántico–. Por esa ruta es por donde trafica la mercancía que envía a compradores rusos.
Su habilidad para los negocios y su determinación le dan fama de la reina de todos los capos que trafican en el sur de España.
Tras gobernar todo el territorio, la reina comienza una nueva relación con su contador, Teo Aljarafe. Pero al darse cuenta que este la traiciona decide eliminarlo.
Mientras camina por las sendas del narcotráfico, el personaje interpretado por del Castillo comenzará y terminará otros amoríos, los cuales va moviendo a su conveniencia, en las fichas de su juego.
El amor no es lo único que se atraviesa en el camino de Teresa. Los incontables secretos que ella conoce sobre hombres poderosos –incluido un político mexicano– le granjearán enemigos que le pisarán los talones en todo momento.
El deseo de venganza está por encima del dinero y del poder que Teresa Mendoza se ha ganado a pulso. Por eso, deja su boyante ruta de Gibraltar para volver a México, donde se enfrentará a su más grande enemigo.