El crédito de $132 millones para mejorar la infraestructura carcelaria en el país avanza sin trabas en el Congreso, luego de que los diputados lo dictaminasen afirmativamente el jueves anterior.
Después del visto bueno de la Comisión de Internacionales del Congreso, el proyecto pasa a primer debate en el plenario, aunque en los últimos puestos.
Así lo reconoció la diputada del Partido Acción Ciudadana, Jeannette Ruiz, quien también preside la Comisión de Internacionales.
Según explicó, el dinero aportado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) servirá para construir nuevas celdas en los centros penales de El Buen Pastor (Desamparados) y La Reforma (Alajuela).
En la cárcel de mujeres, por ejemplo, es necesario reconstruir un muro de contención y hacer nuevos módulos pues una parte de la infraestructura actual está en riesgo de colapso.
La cárcel para adultos jóvenes (ubicada en la Reforma), ya superó su capacidad máxima y se necesitan más módulos, explicó Ruiz.
También se invertirán recursos en la Escuela Nacional de Policía para profesionalizar a sus efectivos; y en la construcción de centros cívicos y deportivos en comunidades de alto riesgo delincuencial.
Según prevé Ruiz, el proyecto podría entrar a discusión en los últimos lugares del plenario, pero podría pasar a ser un tema prioritario si el Ejecutivo lo convoca en sesiones extraordinarias.
“Por ser un tema de seguridad, el Gobierno podría llamarlo en sesiones extraordinarias, que arrancarán el 1.° de diciembre”, agregó la diputada.
Este fin de semana se intentó obtener el criterio de Carlos Ricardo Benavides, ministro de la Presidencia, pero no respondió su teléfono celular.
El préstamo de $132 millones del BID debe ser ejecutado en cinco años, bajo el control del Ministerio de Justicia y Paz.