Jerusalén. AFP y AP. Restos de Homo sapiens de 400.000 años; es decir, 200.000 años más antiguos que los conocidos hasta ahora, fueron encontrados en Israel, anunció el responsable de las excavaciones del Instituto de Estudios Arqueológicos de la Universidad de Tel Aviv, Avi Gopher.
“Descubrimos en una gruta situada al este de Tel Aviv ocho dientes que podrían constituir los primeros vestigios del Homo sapiens”, afirmó Gopher.
“El examen de las estalagmitas y estalactitas, y de otros materiales descubiertos en el lugar, indican que esta caverna comenzó a ser utilizada hace 400.000 años”, explicó.
“Los dientes encontrados en la gruta Qessem estaban esparcidos entre las diferentes capas de la caverna, algunos son de hace 200.000 años y los más antiguos de hace 400.000 años”, precisó.
“Por el momento, está acordado que los restos más antiguos de Homo sapiens que conocemos se encuentran en África y son de hace 200.000 años o un poco menos”, destacó el científico.
Gopher precisó que un primer diente fue hallado en el 2006 en la caverna Qessem, pero que él mismo y sus colegas prefirieron seguir con las excavaciones para encontrar otros dientes y llevar a cabo una serie de exámenes para fecharlos, antes de dar a conocer el descubrimiento.
“Las excavaciones siguen en la gruta. Los investigadores esperan encontrar vestigios que les permitirán consolidar sus trabajos y comprender mejor la evolución de la humanidad y la aparición del hombre moderno”, se explicó en un comunicado de la Universidad de Tel Aviv.
El equipo examinó los dientes con tomografía computarizada y rayos X. Los fecharon de acuerdo con los estratos de tierra donde fueron hallados.
El especialista indicó que se requiere más investigación para fortalecer la afirmación. Si resulta así, señaló, esto cambia todo el panorama de la evolución.
La teoría científica aceptada es que el Homo sapiens se originó en África y migró fuera del continente. Gopher dijo que, si los restos son vinculados definitivamente a ancestros del humano moderno, ello podría significar que éste de hecho se originó en lo que ahora es Israel.
Sir Paul Mellars, un experto en prehistoria de la Universidad de Cambridge, dijo que el estudio es acreditado, y que el descubrimiento “es importante porque son escasos los vestigios de ese período crucial, pero es prematuro decir que los restos son humanos”.
“Con base en la evidencia que han localizado, es una posibilidad muy tenue”, añadió Mellars.