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En mayo del 2009, Narshi Solano (izq.) y Tonatiuh Solano trabajaban en la campaña de Laura Chinchilla. Hoy, el primero tiene un cargo de embajador interno y el segundo fue nombrado ministro consejero en Chile. | CARLOS GONZáLEZ.
Los diplomáticos de carrera denunciaron ayer la creación de una “estructura paralela” en la Cancillería, con duplicidad de funciones, integrada por gente que no es de carrera y nombrada a dedo por la administración Chinchilla.
Se trata de 13 nombramientos políticos que se realizaron sin concurso en el último año, alegando que, con ello, se “potenciarán los intereses de la nación”.
La mayoría de elegidos trabajó en la campaña política de la presidenta Laura Chinchilla, laboró para el Partido Liberación Nacional (PLN) o es familia de dirigentes y militantes del Partido.
Ellos trabajan en la sede central del Ministerio de Relaciones Exteriores como asistentes, asesores, jefes de despacho o directores de departamento.
Algunos realizan tareas de comunicación, prensa y protocolo, aunque la institución ya tiene departamentos a cargo de esos temas, con personal contratado a tiempo completo.
La Asociación Costarricense de Diplomáticos de Carrera, que agrupa a 115 profesionales, emitió ayer un comunicado, firmado por su presidente, el embajador Javier Sancho, en el cual aseguró que esos nombramientos son “ilegales, violentan la ética y el deber de probidad que deben observar los funcionarios públicos”.
Ayer
Consultado ayer en la emisora ADN Radio, el vicecanciller, Carlos Roverssi Rojas, calificó esta práctica como algo “normal”.
Él ocupa una plaza de agregado interno y labora como encargado de redes sociales de la Cancillería.
En agosto del 2010, el ministro Castro también contrató a Narshi Solano, quien fue miembro de la juventud liberacionista y laboró para el PLN en la campaña del 2010.
Él ahora tiene una plaza de embajador interno y trabaja como “coordinador de planificación de programas sectoriales de medioambiente y cambio climático”.
Castro también contrató a un exalumno suyo del Incae y sobrino del primer vicepresidente, Alfio Piva, Alfonso Villanueva Piva, quien se desempeña como director del departamento de Planeamiento.
Otro contratado fue Daniel Baldizón Chaverri, un periodista con el cargo de embajador interno que trabaja como jefe del despacho del vicecanciller, Carlos Roverssi.
Baldizón trabajó para la Presidencia en la administración Arias, fue subjefe de prensa de la fracción legislativa del PLN y productor del programa radial
Otra contratación –esta realizada por el presidente Óscar Arias en abril del 2010– fue la de Renata Muñoz Paniagua, de 23 años, egresada de la carrera de Derecho, quien labora como asesora en la dirección jurídica de la Cancillería.
Ella es hija de la empresaria Xinia Paniagua Vargas, quien trabajó para la Fundación Arias y ha laborado en el PLN.
Paniagua aseguró anoche que ella no tuvo que ver con el nombramiento de su hija. “Para nada. Yo trabajé en la campaña de Johnny Araya y ni siquiera voté por doña Laura, se lo puedo decir”, señaló.
Javier Sancho criticó el uso de plazas del servicio interno, pues, según dijo, estas debían destinarse a los funcionarios de carrera que vienen del exterior. “Son las que garantizan la rotación de los funcionarios del exterior a la sede central del Ministerio, conforme lo indica el reglamento”, explicó.
Marta Núñez, quien hasta la semana pasada fungió como viceministra administrativa en la Cancillería, defendió los nombramientos y dijo que son necesarios.
“¿Qué tiene nombrar profesionales buenos en plazas que están libres? Hay 13 funcionarios que están con un permiso y es recurso humano que hace falta”, aseguró.
Núñez negó que la elección se hubiese hecho siguiendo compromisos partidarios. “Yo recibía la instrucción, pero en ningún momento se me dijo que era gente del Partido, ni que por eso había que nombrarla”, concluyó.
