Nueva York. AP. Paula Abdul y Simon Cowell, exjueces del reality show musical American Idol , volverían a estar juntos otra vez. En esta ocasión será en el panel de jurados de The X Factor, nuevo concurso de canto de la cadena de televisión Fox, según informó una fuente allegada a la producción.
Abdul, quien aparentemente se convirtió en la cuarta juez de este nuevo proyecto, tenía previsto estar presente ayer, domingo, en la grabación de la primera sesión del reality, el cual se realiza en Los Ángeles, dijo la fuente, que habló con la condición de no ser identificada.
Cowell, quien además de juez fungirá como productor de The X Factor, no ha salido a desmentir o confirmar las declaraciones.
Por su parte, los representantes de la popular coreógrafa estadounidense tampoco se han querido referir sobre el tema.
Abdul, de 48 años, es una bailarina, coreógrafa y cantante. En American Idol era la jueza bondadosa que solía protagonizar enfrentamientos divertidos con Cowell, quien, a su vez, hacía el papel del malo.
Decidió dejar el espacio musical en el 2009, luego de ocho temporadas, y de no haber llegado a una satisfactoria negociación con los productores acerca de su salario.
En enero de este año debutó en la cadena televisiva CBS, con su propia competencia para talentos nuevos: Live to Dance. Empero, dicha producción no fue tan exitosa como se espera.
Panel de artistas. Paula Abdul se uniría así a los jueces ya anunciados de The X Factor : la superestrella pop británica Cheryl Cole y el productor ganador del Grammy, Antonio L.A. Reid.
Los conductores de esta nueva producción de Fox serán Steve Jones y Nicole Scherzinger, según dijo la fuente.
Jones es conductor de programas de televisión en Gran Bretaña, mientras que Scherzinger es una exmiembro de la banda Pussycat Dolls, que apareció en la versión británica de The X Factor.
The X Factor es un concurso para solistas y grupos vocales mayores de 12 años, adoptado en diferentes países. El estreno en EE. UU. está previsto para setiembre u octubre, y el premio es un contrato de grabación de $5 millones.