En contraste con el desorden que se generó cuando los diputados del bloque de oposición rompieron el quórum durante la elección del Directorio legislativo, el color negro que utilizó la mayoría de los legisladores le puso un toque de sobriedad al acto.
Los trajes sastre de manga larga en tono negro predominaron en la vestimenta de las diputadas, quienes, en general, optaron por el uso de maquillajes, accesorios y peinados discretos, tal como lo exige el protocolo, según destacó la modista Amanda Moncada.
Entre las más elegantes y respetuosas de las normas, figuraron Gloria Bejarano, diputada del Partido Unidad Social Cristiana, (PUSC), Patricia Pérez (Partido Movimiento Libertario), Viviana Martín (Partido Liberación Nacional) y Elibeth Venegas (PLN), según manifestaron los consultados por La Nación .
Sobre Venegas, Fernando Hidalgo, especialista en imagen, destacó la textura de la tela de su traje que, según dijo, logró estar en tendencia y cumplir con el protocolo.
Los conocedores de moda entrevistados coincidieron en que la libertaria Mireya Zamora desentonó debido al uso de un saco blanco. Ella se limitó a decir que eligió ese tono para lucir uno claro en la mañana y uno oscuro en la noche.
Priscilla Qualls, de Valesky Boutique, opinó que la liberacionista Siany Villalobos también desentonó. Ella lució un traje de dos piezas plateado grisáceo que está fuera de todo protocolo.
“Este exige negro porque es un acto solemne. Eso hay que respetarlo”, agregó Qualls.
El especialista en moda Roberto Lobo aseguró que la exdiputada y exprecandidata del Partido Acción Ciudadana (PAC), Epsy Campbell, tampoco eligió bien su vestimenta.
Campbell llevó una falda a la rodilla con estampado floral, una blusa de escote pronunciado y un bolso negro de tamaño mediano.
Lobo consideró que esos tres elementos hicieron que su traje resultara inapropiado para la solemnidad del acto.
Campbell fue una de las pocas personas que se cambió de ropa para la sesión de la tarde. Ella decidió utilizar un atuendo mucho más informal y cómodo.
Su elección fue un pantalón negro, una blusa de color cobre y unos zapatos con tacón tipo cuña.
Un detalle que olvidaron algunas diputadas, tal como Annie Saborío, fue que los zapatos adecuados para actos oficiales deben ser cerrados, de cuero mate y de tacón fino. “Los de charol, muy altos y adornados son para fiesta, no son formales, al igual que las sandalias” , advirtió Lobo.
Elegancia máxima. En el caso de los hombres, la mayoría se apegó a las normas protocolarias que exigen el uso de traje negro, camisa blanca y corbata gris. Mención aparte merecen el libertario Carlos Góngora y Víctor Emilio Granados (Partido Accesibilidad Sin Exclusión, PASE), quienes cumplieron a cabalidad con el protocolo y exhibieron traje completo (con chaleco incluido), explicaron los entrevistados.
Los diputados que definitivamente pasaron por alto las normas de la vestimenta fueron José María Villalta (del Partido Frente Amplio) y Claudio Monge (PAC), quienes no usaron corbata.
“No hay excusa para no llevar corbata, pues es una regla básica del protocolo. Si es porque hace calor, hay que soportarlo. Quienes participan en estas actividades, deben acatar las reglas establecidas”, aseveró Roberto Lobo.