Cada vez más adultos mayores asumen la jefatura del hogar y se convierten en los principales sostenes de sus familias.
Así lo señala una encuesta del Instituto de Estudios Sociales en Población (Idespo) y del Programa de Atención Integral a la Persona Adulta Mayor (Paipam), ambos de la Universidad Nacional.
Según el estudio, realizado con 800 personas mayores de 60 años, el 73,2% de las personas son jefas de hogar, el 90,6% son los propios administradores de su pensión y el 49,6% no solo mantienen su hogar, sino que ayudan a sufragar los gastos de sus hijos y nietos.
“El aporte de los adultos mayores a sus hijos y nietos es vital. Muchas familias no caen en la línea de pobreza gracias al aporte de los adultos mayores”, explicó Maribel León, coordinadora del Paipam.
Para la investigadora, la difícil situación económica y el desempleo hacen que las personas mayores asuman roles económicos en las familias de sus hijos o nietos. Esto ya ha sido señalado por estudios anteriores de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
“Como los hijos están desempleados o no tienen un empleo fijo, los adultos mayores asumen la casa con sus pensiones y se convierten así en jefes de hogar por su aporte económico”, agregó León.
La encuesta también reveló que las personas de la tercera edad necesitan mayor participación en los diferentes espacios de la sociedad civil.
Solo el 50% de los encuestados consideró que sí existen políticas públicas que incentiven la participación de los adultos mayores en acciones que les permitan ser protagonistas de la sociedad civil.