Puerto Príncipe. El presidente de Haití, Jovenel Moise, fue asesinado y su esposa resultó herida a primera hora de este miércoles en un ataque con armas de fuego en su residencia privada, un magnicidio que empeora la crisis política que sufre el país.
El primer ministro, Claude Joseph, declaró el estado de sitio, dijo estar ahora a cargo del país y llamó a la calma mientras aseguraba que la Policía y el Ejército se encargan de garantizar la seguridad de la población. Mientras, crecían la indignación y la conmoción en la comunidad internacional.
“El presidente fue asesinado en su casa por extranjeros que hablaban inglés y español”, informó Joseph sobre el asalto, ocurrido sobre la 1 a.m.
“Esta muerte no quedará impune”, dijo en un discurso a la nación.
La primera dama, Martine Moise, fue inicialmente tratada en un hospital local y luego evacuada por avión a Miami, donde es atendida en el hospital Jackson Memorial, reportaron varios medios estadounidenses.
En la tarde, el viceministro de Comunicaciones, Frantz Exantus, anunció la detención de dos “presuntos asesinos” del presidente tras un operativo realizado en el barrio de Pelerin, en Puerto Príncipe. Luego la Policía afirmó que “cuatro mercenarios” fueron abatidos a causa del crimen.
“Cuatro mercenarios fueron asesinados, dos puestos bajo nuestro control. Tres policías que habían sido tomados como rehenes fueron recuperados”, dijo el director general de la Policía haitiana, Leon Charles, en un comunicado por televisión.
Lo ocurrido amenaza con desestabilizar aún más al país, ya enfrentado a una doble crisis: política y de seguridad.
Moise gobernaba por decreto Haití, el país más pobre del continente americano, después de que se postergaran las elecciones legislativas previstas para el 2018.
Además, en los últimos meses aumentaron los secuestros extorsivos, reflejo de la creciente influencia de las bandas armadas en el país caribeño.
LEA MÁS: Conmoción en el mundo por el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moise
Haití también convive con una pobreza crónica y recurrentes desastres naturales.
Moise enfrentaba una fuerte oposición por parte de sectores de la sociedad que consideraban su mandato ilegítimo. En los últimos cuatro años el país tuvo siete primeros ministros.
Asimismo, estaba previsto que Joseph fuera sustituido esta semana tras tres meses en el cargo.
Puerto Príncipe paralizado
Tras el anuncio del asesinato, todas las actividades, los comercios y transportes se paralizaron en Puerto Príncipe y otras ciudades, según testimonios.
Las calles de la capital se encontraban en calma este miércoles, sin presencia reforzada de la Policía o las fuerzas de seguridad.
El presidente estadounidense, Joe Biden, condenó en un comunicado el “acto atroz” y envió sus “más sinceros deseos para la recuperación de la primera dama Moise”.
En tanto, el Departamento de Estado estadounidense pidió realizar las elecciones legislativas y presidenciales previstas en Haití para este año.
También manifestaron su férrea condena Reino Unido, Francia, España y numerosos países de América Latina como Costa Rica, México y Colombia.
LEA MÁS: Inestabilidad, pobreza, desastres naturales: cinco claves sobre Haití
Mientras que la Organización de los Estados Americanos (OEA) declaró su apoyo a la democracia en Haití al condenar enérgicamente el asesinato, tras una sesión virtual extraordinaria de su Consejo Permanente.
El embajador de Haití en Washington, Bocchit Edmond, comentó que los autores del magnicidio eran mercenarios “profesionales” que se hicieron pasar por agentes de Estados Unidos y posiblemente ya hayan huido del país.
“Fue un ataque bien planificado y eran profesionales”, aseguró Edmond a periodistas. “Tenemos un video y creemos que eran mercenarios”.
Múltiples crisis
Moise, un exempresario que levantó varios negocios en el norte del país, de donde es originario, irrumpió en la escena política en el 2017 con un mensaje de reconstrucción.
Hizo campaña con promesas populistas, pero mantuvo la retórica incluso después de ser elegido en febrero del 2017.
La extensión de su mandato se convirtió en fuente de enfrentamiento político. Moise mantenía que su gobierno duraba hasta el 7 de febrero del 2022, pero otros afirmaban que terminaba el 7 de febrero del 2021.
LEA MÁS: Haití, sumido en inestabilidad política desde 1986
El desacuerdo surgió porque Moise fue elegido en una votación anulada por fraude y un año después volvió a ganar las elecciones.
Sin parlamento, la crisis del país se agudizó en el 2020 y llevó a Moise a gobernar por decreto, lo que avivó la desconfianza hacia su persona.
Elecciones postergadas
El Consejo de Seguridad de la ONU, Estados Unidos y Europa habían pedido que se celebraran elecciones legislativas y presidenciales libres y transparentes para finales del 2021.
El lunes, Moise había anunciado el nombramiento de un nuevo primer ministro, Ariel Henry, de 71 años, quien participó en la respuesta al coronavirus en Haití y anteriormente ocupó cargos de gobierno en el 2015 y el 2016 como ministro del Interior y luego de Asuntos Sociales y Trabajo.
También fue miembro del gabinete del ministro de Sanidad entre junio del 2006 y setiembre del 2008. Seguidamente se convirtió en jefe de gabinete, cargo que ocupó hasta octubre del 2011.
Moise encargó a Henry “la formación de un gobierno de base amplia” para “resolver el flagrante problema de la inseguridad” y trabajar para “la celebración de elecciones generales y el referendo”.
A pesar de ser próximo a la oposición, el nombramiento de Henry no fue bien recibido entre sus filas, que continuaron exigiendo la dimisión del presidente.
El gobierno de República Dominicana ordenó el “cierre inmediato” de su frontera con Haití tras el magnicidio.