Esta técnica de coloración, cuyo nombre proviene del francés, hace un “barrido” o “arrastre” de iluminaciones a lo largo de la melena que permite disimular canas y contornear el rostro, suavizando facciones y resaltando aquellos aspectos más favorecedores.
De acuerdo con Carlos Cuesta, Hair & Makeup Artist y fundador del estudio de belleza Capello, escoger el balayage ideal no es una tarea que se haga a la ligera.
Además de considerar la tonalidad de la piel, el color de los ojos y los rasgos faciales, es necesario tomar en cuenta los siguientes factores:
1. Condición: hay que revisar el estado del cabello, en especial, si se ha realizado previamente tinturación, alaciado o rizado.
“Si el cabello está muy procesado químicamente y no ha recibido tratamientos para su reestructuración, el tono de las mechas que se obtenga podría alejarse bastante a lo esperado. Hay que recordar que una melena sana y que está bien hidratada, es el mejor lienzo para plasmar iluminaciones”, manifiesta el experto.
2. Base y pigmentación: al momento de hacer las mechas, hay que tener en consideración el tono base que tiene el cabello y, en particular, la pigmentación a la que tienden sus hebras.
“La pigmentación del cabello no solo varía de una persona a otra, sino también a lo largo de la vida, y esto influye en el tono que adquirirá el balayage. Cuando alguien me muestra una fotografía de las mechas que le gustan, debo aclararle que el resultado final podría tener muchas similitudes con la imagen de referencia, pero no será totalmente idéntico, por las razones mencionadas”, agrega Cuesta.
3. Deseo: quien quiere optar por este look en su cabellera deberá recordar que mientras más claras sean las mechas más frecuentes serán sus visitas al salón.
“Los tonos rubios extra claros o platinados suelen requerir tratamientos muy intensivos para proteger la estructura de las hebras capilares; además el contraste entre la raíz del cabello y el balayage es mucho más evidente”, explica el Hair & Makeup Artist.
4. Tiempo: estrechamente vinculado al punto anterior, se encuentra la cantidad de tiempo que la persona pueda invertir para ir al salón. Un balayage con tonos muy claros tenderá a ser más “exigente”, en cuanto a mantenimiento o retoque, que uno con tonos dorados, caramelos o chocolates.
5. Estilo: el especialista recuerda proteger el cabello del sol, el viento y el agua salada, pues estos elementos podrían ocasionar no solo resequedad, sino también que las mechas pierdan brillo e intensidad de color.
Para lucir una cabellera radiante, no solo se debe nutrirla e hidratarla de manera constante. En el caso de las iluminaciones, es vital además que estas se apliquen de acuerdo con el peinado que la persona acostumbre llevar.
“Es importante tener en cuenta si la persona prefiere usar el cabello liso o con ondas, pues según el estilo se deberá diseñar el balayage que le sentará mejor”, concluye Cuesta.
Fuente: Carlos Cuesta, Make Up & Hair Artist (Facebook e Instagram: @Carlos Cuesta Beauty / teléfono: 2279- 8252 / WhatsApp: 8420- 7519).