Investigar requiere inversión, y para Édgar Gutiérrez, jerarca del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), esos fondos podrían venir del fisco y usarse para generar datos científicos que orienten las decisiones políticas del país.
“Lo que se necesita es la reforma fiscal”, urgió Gutiérrez durante la conferencia de prensa que antecedió la inauguración de la reunión internacional sobre el Memorando de Entendimiento (conocido como MdE) sobre Conservación de los Tiburones Migratorios, que se lleva a cabo en Costa Rica.
“Esto no es un asunto partidiario, este es un asunto que tiene que verse con una visión país”, agregó el ministro.
La investigación, aunque costosa en el corto plazo, permite que las naciones puedan tomar decisiones sobre sus recursos naturales. Ese conocimiento científico ayuda a saber cuáles son los límites para así evitar el colapso y seguir disfrutando de esos recursos, así como prever escenarios de riesgo.
Sostenibilidad. A pesar de su tamaño, Costa Rica es una nación rica en biodiversidad, agua dulce y océanos. Sin embargo, no sabe a ciencia cierta cuánto tiene a su haber y los datos con que sí cuenta están dispersos.
El riesgo yace en que ese desconocimiento podría propiciar que se tomen decisiones políticas sin poder calcular el impacto futuro sobre los recursos naturales y, por ende, sobre el modo de vida de las personas.
“Se trata de poder aprovechar los recursos pero de una manera que sea sostenible y eso significa que tenemos que conocerlos. De esa forma, podemos determinar cuáles son los niveles saludables de los ecosistemas y así establecer los niveles de aprovechamiento”, explicó Gutiérrez.
Esa visión de desarrollo sostenible está amparada en la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y Desarrollo, que data de 1992, y se basa en la triada: conocer, conservar y aprovechar.
“Si queremos jugar en las grandes ligas, como en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), vamos a tener que invertir en fondos para investigación”, añadió el jerarca del Minae.
“La OCDE no nos va a facilitar la entrada como miembro pleno si nosotros no demostramos que hay una vocación de Estado en buscar la evidencia científica para que guíe nuestras acciones”, indicó Gutiérrez.
Protección. Del 15 al 19 de febrero, Costa Rica recibe la visita de los representantes de 37 países signatarios del MdE, quienes definirán planes de conservación para 20 especies de tiburones y rayas, las cuales ya fueron incluidas, en el 2014, en la Convención de Especies Migratorias.
En este sentido, el MdE apuesta a la investigación para orientar esas recomendaciones de conservación y aprovechamiento que derivarán en acciones en cada uno de sus miembros.
Para el viceministro de Aguas, Mares, Costas y Humedales del Minae, Fernando Mora, desde su despacho lo que pretenden es que los procesos de política pública se desarrollen con respaldo de estudios científicos.
“Buscamos que las decisiones estén refrendadas por un argumento técnico y trabajamos en cosas como estadísticas sobre aprovechamiento, trazabilidad de los productos del mar, desde tiburones hasta dorados o atunes, por ejemplo, e incluso llegar al consumidor”, detalló Mora.