La amenaza que lanzó un oficial de la Fuerza Pública a una joven el pasado 29 de marzo provocó el repudio de cientos de usuarios en las redes sociales.
“Usted me las paga, usted me las paga porque aquí está mi arma”, advirtió el policía a una joven que, junto a otros amigos, practicaban skate (patinaje) en una vía pública de Alajuela.
Los muchachos aprovechaban el escaso tránsito propio de un Viernes Santo para hacer su deporte, cuando de manera intempestiva un oficial bajó de la patrulla, hizo un disparo al aire y procedió a decomisarles las patinetas.
El policía amenazó a la joven cuando esta trataba de grabar con una cámara de video e incluso trató de agredirla.
Casos como el de este grupo de jóvenes han engrosado las denuncias por abusos de autoridad, que crecieron en un 72,3% en los últimos cinco años.
Solo en el 2012, los 15 circuitos judiciales del país recibieron 2.061 quejas de ese tipo (casi seis denuncias por día) de acuerdo con los datos suministrados por la Sección de Estadísticas del Departamento de Planificación del Poder Judicial.
Las cifras abarcan las demandas de ciudadanos contra funcionarios policiales y fueron 865 más en comparación con las presentadas en el 2008 que ascendieron a 1.196.
Los abusos policiales tomaron notoriedad hace un mes, cuando se reveló la golpiza que recibió un reo dentro de las celdas judiciales en Goicoechea , San José.
En esa ocasión, 11 de julio del 2013, dos custodios llegaron a las celdas con Mayron Joel Cabrera Calvo, de 20 años, un reo que descuenta tres años y cuatro meses de cárcel por robo agravado y quien debía comparecer en un juzgado por otra causa por robo.
Según la información oficial, un custodio de apellido Matamoros tuvo una discusión con Cabrera y cuando lo llevaba para celdas lo empujó. Luego, una vez en la celda y cuando otro custodio (Calvo) le quitó las esposas, ambos presuntamente le propinaron golpes con la mano y con los pies.
Pocas sanciones. Pese al crecimiento de las denuncias, según la Sección de Estadísticas, en el 2012 los tribunales penales solo condenaron por ese delito a 16 funcionarios públicos, entre ellos dos mujeres y 14 hombres, con edades entre los 21 y los 54 años.
El crecimiento de estas denuncias no enciende las alarmas en el Ministerio de Seguridad.
Mario Zamora, jerarca de esa cartera, consideró que el número no refleja una cifra objetiva, como sí lo representa la resolución final.
“Las denuncias por sí solas no son un dato que indiquen que se hayan consumado esas conductas”, dijo Zamora. El jerarca prefirió analizar el número de condenas del 2012.
“Si comparamos el número de denuncias del año pasado y los casos resueltos en ese mismo año, los resultados finales no alcanzan ni el 1%. Una policía abusiva sería si de cada 10 denuncias, cinco fueran ciertas”, añadió el jerarca.
Capacitación es clave. La mayoría de los jefes de las policías del país coincidieron en que la capacitación es el arma fundamental para combatir los abusos policiales.
Juan José Andrade, director de la Fuerza Pública, mencionó que entre las filas de sus oficiales las denuncias por abusos han decrecido.
La Fuerza Pública investigó 207 casos en el 2011; en el 2012 estudiaron 111 reclamos y hasta junio del 2013 registraban ocho denuncias.
“Se capacita a los oficiales sobre los derechos del imputado y de la víctima”, destacó Andrade.
Francisco Segura, director del OIJ, especificó que las denuncias contra sus oficiales primero se elevan a una investigación interna.
Por su parte, el subdirector de Adaptación Social, Reynaldo Villalobos, estimó que la formación y la capacitación es el arma contra los abusos de autoridad. “Hay que invertir más en capacitación del personal”, resaltó.