La alta mar constituye el 64% del océano y, aunque beneficia a todos, no pertenece a nadie. Por esa razón está a merced de la sobreexplotación, la pérdida de biodiversidad y la contaminación.
De tomar acciones inmediatas y coordinadas a nivel internacional, estas aguas, que se extienden más allá de las zonas económicas exclusivas de los países, podrían recuperarse y así seguir suministrando el 50% del oxígeno y la proteína necesaria para la humanidad.
Para ello, los expertos de la Comisión Mundial del Océano (GOC, por sus siglas en inglés) diseñaron un plan de rescate a cinco años, basado en ocho propuestas.
La primera es convertir el tema marino en un Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) y crear una Secretaría del Océano en Naciones Unidas que facilite la coordinación entre las naciones y las entidades dedicadas a esta materia.
Con esto se atacaría, en una primera instancia, el problema de gobernanza que aqueja a la alta mar.
Otra medida sería impulsar un acuerdo en el marco de la Convención del Derecho del Mar para dar prioridad a la salud de los océanos, restaurar su productividad y protegerlo de la sobreexplotación y otras prácticas insostenibles.
En cuanto a la pesca, se limitarían las subvenciones que disfrutan solo 10 países, a pesar de que el 60% de estas derivan en prácticas insostenibles. También se combatiría la pesca ilegal, no reportada y no reglamentada, así como la pesca incidental y fantasma al regular los dispositivos de concentración de peces, conocidos como plantados.
La contaminación se regularía al minimizar el uso de plásticos a través de la intervención gubernamental en los países y se promovería un convenio sobre responsabilidad y compensación de daños ambientales para las industrias de petróleo y gas.
Para ayudar a restablecer las poblaciones de peces, GOC propone crear zonas de regeneración, que serían como áreas marinas en alta mar que gozarían de medidas de protección y manejo.
Así se desprende del informe Del declive a la recuperación: Un plan de salvación para los océanos del mundo , dado a conocer ayer por la GOC, órgano consultor creado en febrero de 2013 por iniciativa de The Pew Charitable Trust, en colaboración con organizaciones como Adessium Foundation, Oceans 5, Swire Trust y Somerville College de la Universidad de Oxford.
“La alta mar abarca el 48% de la superficie del planeta. Es el octavo continente y su estado de salud está decayendo”, advirtió José María Figueres, copresidente de la GOC. Agregó: “De no ser que cambiemos el rumbo de declive del océano en cuestión de cinco años, la comunidad internacional debería considerar la posibilidad de convertir la alta mar en una zona de regeneración totalmente protegida hasta que se restablezca su estado de salud”.