Puntarenas y San Carlos. Las fuertes lluvias que cayeron durante la noche del martes y madrugada de ayer, en varios sitios de Puntarenas, afectaron al menos 310 casas, tres de las cuales sufrieron cuantiosos daños por la caída de un árbol.
El primer aguacero fuerte se registró a las 5 p. m. y afectó varios barrios de Barranca, El Roble y Puntarenas centro, confirmaron los diversos cuerpos de socorro.
Un segundo chaparrón que cayó a las 10 p.m. provocó la mayoría de daños en el barrio Bellavista, el cual se sitúa un kilómetro al norte del Hospital Monseñor Sanabria.
Dentro de Bellavista se ubican otras pequeñas barriadas como Josué, Santa Fe, La Plaza y Verolís.
En el barrio Josué hubo 80 casas inundadas y 12 en Santa Fe, las cuales, en su mayoría, son ocupadas por familias de escasos recursos, madres solteras y ancianos.
Una de las mujeres que tuvo que correr fue Escarleth Zeledón, vecina del barrio Josué, quien fue sorprendida por las lluvias cuando dormía junto a su hija de tres años.
“Desde el martes se empezó a llenar y llenar. Vivo con mis cuatro hijos y me asusté mucho porque la casa tiene piso de madera. Me bajé de la cama cuando el agua me llegó por los tobillos”, aseguró Zeledón.
Carmen Vargas, dirigente del barrio Josué, aseguró que su principal temor es por la gran cantidad de serpientes y cocodrilos que habitan cerca del estero.
El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) informó anoche de que el sistema de baja presión permanecía sobre Nicaragua, lo cual hizo que perdiera intensidad, disminuyendo su afectación y aislando las lluvias en el país.
Destrozó vivienda. En el momento en que sus moradores aún dormían, un árbol de guanacaste cayó, ayer a las 6 a. m., encima de una casa y dos estructuras humildes del barrio El Progreso en Puntarenas. Los damnificados fueron los integrantes de la familia Hernández Ovares, quienes hace tres años adquirieron el terreno, donde levantaron las viviendas.
Debido a la caída del árbol resultó con heridas de consideración, en un brazo, Luis Ángel Hernández, de unos 56 años, luego de que una lámina de cinc del techo lo prensó.
Los ocupantes denunciaron que meses atrás habían solicitado a la Municipalidad la poda del árbol, pero nunca hubo respuesta.
Una niña de año y medio, nieta de Hernández, también resultó con golpes varios por la emergencia.
Postes caídos. Antenoche, un derrumbe también afectó la carretera que une el caserío de Santa Rita con Bajo Rodríguez de San Ramón, contiguo al puente sobre el río La Balsa. También postes del tendido telefónico cayeron al cauce del río, lo que dejó sin servicio a vecinos de Santa Rita, quienes además sufrieron daños en Internet por la fibra óptica, aseguró Benedicto Gómez, encargado de redes telefónicas del ICE en la zona norte.
En Lotes de Aguas Zarcas, las aguas desbordadas del río Aguazarquitos inundaron 30 casas, en Boca Arenal de Cutris se reportaron 15 casas anegadas por el desbordamiento de una quebrada y en La Lucha de La Tigra la correntada del río La Tigra arrasó un puente peatonal de 25 metros de largo, el cual desapareció por completo. Este era usado por los vecinos para llegar en 20 minutos caminando al centro de La Tigra, por lo que ahora deberán recorrer a pie seis km.