Alajuela. Venezuela, primer rival de la Selección Nacional en el Mundial Sub-17 Costa Rica 2014, llegó ayer al país con la maleta cargada de muchas ilusiones, pero también con unas cuantas obligaciones.
Entre las primeras está clasificarse a la segunda ronda; entre las segundas está ofrecerle un buen debut a las 34.473 personas que asistirán al partido ante las ticas este sábado en el Estadio Nacional.
Y de alguna manera ambas cosas van relacionadas, según explicó su técnico, Kenneth Zseremeta.
“Sabemos que ganar el primer partido es fundamental para nuestras aspiraciones en este torneo. Y también sabemos que para hacerlo tenemos que jugar bien, ya que Costa Rica tiene una gran preparación”, adujo el entrenador del equipo campeón suramericano.
El encuentro será a las 8 p. m., minutos después de la ceremonia de apertura, la cual está programada para empezar cuando acabe el duelo inaugural de Italia-Zambia.
“Sé que todas las muchachas van a dar tremendo espectáculo de fútbol. Espero que la figura sean las 22 jugadoras”, dijo Zseremeta.
La Vinotinto salió campeona del Sudamericano Sub-17 que se realizó en el 2013, por lo que también trae algo de presión.
Empero, su timonel no lo esconde y más bien se ampara en la buena eliminatoria que realizaron para acrecentar la confianza.
“Nosotros dejamos fuera de un Mundial a Brasil y a Argentina. Tenemos que hacer respetar ese hecho. Hemos tenido mucho rato para pensar y reflexionar las cosas que venimos a hacer y las jugadoras están muy concentradas”, dijo.
Dificultades. No obstante, más allá de los resultados, el camino al Mundial no fueron puras sonrisas para las jóvenes venezolanas.
Según su técnico, las últimas semanas de su preparación las tuvieron que realizar en México, gracias a una intervención de la Federación azteca, debido a los conflictos políticos que aquejan a su país.
“Fue difícil para ellas estar lejos de sus familias y escuchar las noticias de lo que estaba pasando. Apenas volvimos unos días a Venezuela para que abrazaran a sus seres queridos, pero totalmente hermetizadas por seguridad”, adujo.
“Psicológicamente eso podría pesar, pero apostamos a que con la emoción del debut todo eso cambie para llenarnos de alegría”, añadió.
Esta es la segunda participación de la Vinotinto en un Mundial de la categoría, luego de haber estado en Trinidad y Tobago 2010. En esa ocasión se quedaron fuera en fase de grupos e hicieron tres puntos.