Escazú
Juan Carlos Rojas, presidente de Saprissa, brindó a La Nación su análisis de los cinco años que tiene Horizonte Morado al frente de la institución.
Durante más de media hora, el jerarca de la S conversó con este medio y manifestó que Jorge Vergara no se dejó ni una sola acción del equipo. Agregó que afrontar las deudas ha sido lo más difícil desde que está al frente del club. Además, habló sobre lo que se viene para los morados.
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¿Qué balance hace de estos cinco años de Horizonte Morado al frente de Saprissa?
Cumplimos cinco años y pareciera ayer cuando entramos. La verdad ha sido un trabajo muy duro. Habíamos analizado la inversión en Saprissa durante casi seis meses, que fue el proceso de negociación; una negociación difícil con Jorge Vergara y su gente.
"En esa negociación se hizo un análisis de lo que se quería hacer porque no era tanto comprar Saprissa, sino qué nos ilusionaba hacer, el para qué, qué ibamos a asumir, cuáles responsabilidades queríamos. Hubo muchísimo trabajo".
"Desarrollamos un plan que se llama Plan Saprissa 2020 que consta de cinco ejes: el deportivo, la afición, comercial, estadio y responsabilidad social. Ese es nuestro plan de negicio para presente y futuro. Se empieza a trabajar desde el día uno con una visión clara".
"Como todo, en el camino se encuentra uno realidades que no esperaba, una realidad distinta a las que uno analizó, otras que sí eran de esperar, pero era un reto gigantesco, yo diría titánico. Había que hacer una renovación en infraestrutura, deportiva y administrativa-financiera".
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¿Cómo fue recibir el estadio hecho un basurero y qué se ha hecho para cambiarle la cara a la Cueva?
Cuando entramos sabíamos que iban a venir balazos de todo lado, empezamos a recibir demandas de gente que había quedado insatisfecha como empleados, exjugadores, por lo que hizo la administración Vergara y otras anteriores. Había que resolver temas judiciales y con Fodesaf que existía una deuda de un millón de dólares. Nosotros dijimos que la prioridad es quedar bien y hacerle frente a estas responsabilidades y no queda más que asumirlas.
"Horizonte Morado tuvo que aportar recursos adicionales porque el estadio había que remodelarlo, como dice usted, era un basurero, no representaba al Saprissa que es el estadio más famoso, más icónico de todo Centroamérica. Nosotros no lo íbamos a permitir, y por eso hicimos inversiones. Del 2012 al 2015 se invirtió más en el estadio que en los 15 años pasados completos; el cambio fue total. Por supuesto que falta, pero hacia eso vamos".
¿Cuánto dinero se ha invertido en este tiempo?En el estadio se ha invertido $5 millones (¢2.710 millones), es muchísimo dinero. Lastimosamente mucha de esa inversión no se ve, obviamente algunas sí como los techos nuevos, iluminación, butacas, cancha, gramilla, plaza del oeste, algunos baños, todo lo que es zona mixta, camerinos, sala de prensa, las barandas, las mallas; pero hay otro montón de cosas que no se ven como estructura del estadio. Tuvimos un terremoto donde se le metió $500.000 al estadio en temas estructurales, como la seguridad y el cableado eléctrico porque era un peligro estar ahí, por eso se renovó todo, se hizo inversión en temas electromecánicos.
¿Cómo han sido las inversiones en cuanto a la infraestructura?
Es complicado abordar tanta cosa al mismo tiempo, hemos sido muy saprissistas en tratar de querer todo como intentar tener un equipo ganador con un desarrollo integral en todas las áreas, pero si queremos volver a un mundial de clubes tenemos que tener esta infraestructura de entrenamiento y todo lo que se ha venido haciendo.
"En la medida en que queremos títulos, desarrollo de cantera, centro de entrenamiento, cancha de primer nivel, eso es complicado financieramente, máxime cuando en ese momento vienen cobros de deudas, dichosamente hemos sido exitosos en crecer los ingresos y aumentar la rentabilidad. El compromiso es total y absoluto y eso ha permitido que Saprissa esté donde está".
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¿Siente que han faltado los títulos en sus cinco años, al contabilizar tres cetros en diez campeonatos?
Me acuerdo los primeros tres años, es más, no llegamos ni a una sola final. La impaciencia se estaba haciendo sentir, los comentarios eran gracias a Horizonte Morado porque administrativamente nos va muy bien, porque el estadio está lindísimo, pero no saben nada de fútbol, queremos títulos. Era lo que se decía, lo que se escuchaba, mi discurso fue al igual que se tuvo que renovar el estadio se tuvo que renovar todo lo que tiene que ver en la parte deportiva porque había que darle un giro al equipo.
"Se debutaron más de 10 jóvenes que de principio no se podían esperar los resultados que todos hubiéramos tenido, pero la paciencia que tuvimos fue importante. Al final fue exitoso el proceso que llevamos para ganar tres de los últimos cuatro títulos, eso sin duda valida la estrategia y la paciencia que tuvimos al principio y termina de cerrar el ciclo de una renovación de la institución, se conjuga uno de los ejes que era el deportivo que nos hacia falta".
¿Qué opina cuando se compara su admisnitración con Vergara?Siempre va a haber comparaciones, si este jugador fue mejor que otro o si esta administración fue mejor que la otra, eso siempre va a pasar. Eso en esta industria y en cualquier faceta de la vida se está expuesto. No le rehúyo a ese tema.
"Yo no tengo por qué hablar mal de Jorge Vergara, él salvó a Saprissa en su momento, lo salvó de desaparecer, fue el único que vino y como dicen, puso el huevo. De pronto cualquier persona pudo haber hecho un grupo y no lo hizo. Hay que agradecerle a todos los que aportaron, no cabe ninguna duda que la primera fase de la era Vergara fue de las más exitosas en la historia del Saprissa a nivel deportivo y nadie puede dejar de alabar ese título de Concacaf y ese tercer lugar en el Mundial de Clubes, eso va a ser dificilísimo de repetir para cualquier equipo de Centroamérica".
"Después por las razones que sea, don Jorge perdió interés, creo yo, y por eso los últimos años de la era de don Jorge no tuvieron tanto enfoque; faltó inversión y ahí es donde empieza a caer la infraestructura, los títulos y todo. Don Jorge lo reconoció y estoy agradecido por eso, que ya pensaba que Saprissa debía volver a manos de costarricenses. No voy a hablar mal de don Jorge en ese sentido".
¿Vergara sigue teniendo acciones en Saprissa?
Don Jorge no tiene ni una sola acción de Saprissa, así que no. Cuando se hizo la transacción se compraron todas las que tenía don Jorge; sí se especuló mucho, no sé si por morbo o por malintención de algunos. Es más, si tuviera alguna acción en buena hora, pero no es así. Horizonte Morado tiene hoy el 70% del Deportivo Saprissa.
¿Cómo se le ha hecho frente a las deudas? ¿Las esperaban?
Sí, eso es la parte fea, es la parte más difícil y muchísimos recursos de las institución se van en este rubro. A las deudas se les está haciendo frente, no es fácil y es mucho dinero el que se va en eso, solo entre la CCSS y Fodesaf superan los $4 millones y ya había un acuerdo con la CCSS de más de $1 millón.
"Quisieramos utilizar esos recursos en otros temas, pero son las cartas con las que estamos jugando".
LEA: Vida de 80 jóvenes se transforma en el Centro de Entrenamiento SaprissaSobre esto que menciona, ¿cuál es el rumbo que tomará Saprissa?
La meta máxima tal vez en cada uno de esos rubros la tengo muy clara. En el área deportiva se divide en dos, siempre buscar los títulos, pero tenemos una gran sueño de volver al Mundial de Clubes, nunca tenemos que dejar de soñar con eso, cada vez es más difícil por los clubes mexicanos y la MLS; ese sueño se va a mantener vivo. El otro es a nivel de cantera.
"A nivel de afición lo más importante es jugar a estadio lleno, yo quisiera jugar a estadio lleno o casi lleno siempre, puede sonar un poco utópico, pero no vamos a dejar de soñar para que ese estadio para que indistintamente de la jornada hayan por lo menos 12.000 o 15.000 personas por partido. No hay nada más importante que el apoyo en las gradas".
"A nivel comercial fortaleciendo las relaciones con los patrocinadores, con el desarrollo de la marca para que crezcan los ingresos. A nivel de estadio seguir creciendo, tener un estadio con más inversión, con un buen parqueo, queremos hacer algo en norte, queremos construir en el estadio, todavía hay mucho lo que se puede hacer. A nivel de responsabilidad social es que la Fundación pueda seguir impactando más jóvenes en el país, tanto por el ejemplo que damos así como con recursos que vayan guiados al deporte como motor de cambio para nuestra juventud".
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¿Se puede esperar fichajes para la Concacaf para intentar llegar a un mundial de clubes?
Por supuesto que queremos ser protagonistas en Concacaf, queremos dejar un buen sabor de boca en la participación internacional que representa a este país y gran afición. Tenemos como mandato pensar en que lleguemos fuertes a Concacaf, evidentemente dentro de las posibilidades y realidades que tenemos, me encantaría hacer tres o cuatro megacontrataciones bomba y duplicar el presupuesto que hoy tenemos, pero no se puede.
"Si no tuviéramos que hacer frente a las deudas de administraciones anteriores, quizás podríamos ser más agresivos con fichajes, pero a billeterazo no podemos competir con los clubes mexicanos. Sí, ambicionamos a que nos vaya bien en Concacaf, todo lo que hacemos tiene que ir con miras a construir un buen plantel para ser competitivos y en una de esas poderla ganar y volver a un mundial de clubes".