San José, California. La llamada Internet de Todo es una fuerte tendencia que pretende conectar cada vez a más personas con datos, procesos y cosas.
Puede entenderse en artículos tan simples como una banda en su muñeca que le brinda datos de cuántos pasos da al día, o en hechos tan complejos como conectar todas las partes involucradas en la manufactura de un producto y hacer que compartan información.
Así lo describe Rebecca Jacoby, oficial en jefatura de Sistemas de la compañía Cisco, en la tercera edición de la Conferencia Global de Editores, realizada en San José, California, Estados Unidos.
Con la “tecnología que se puede vestir” o wearables, las personas pueden analizar por sí mismas los datos que les ofrece una pulsera inteligente para funciones como contar las calorías quemadas tras hacer ejercicio.
Sin embargo, la tendencia busca llegar a niveles más sofisticados, en los que se conecte la información de varias empresas responsables de ensamblar dispositivos y de quienes los distribuyen.
“Toda esa gente tiene información de lo que pasa con esos productos y cómo fueron construidos. De lo que trata la Internet de Todo es de que puedas tomar esa información, ponerla junta de manera simultánea, y darle un uso nuevo”, agregó Jacoby.
La analista aclaró que no basta con recopilar los datos; es preciso incluir la parte analítica para entender los datos que se obtengan y el tema de la seguridad, para evitar que la información sea usada con otros propósitos.
Por su parte, Kelly Ahuja, vicepresidente del negocio de Proveedores de Servicios, Productos y Soluciones, dijo que la Internet de Todo representa una tremenda oportunidad. Afirmó que no es el futuro, sino el presente.
Según Ahuja, la tendencia se puede aprovechar, por ejemplo, con los carros conectados. Al estar los vehículos conectados, podrían enviar información a las compañías de seguros. Así, estas tendrían datos de primera mano y en tiempo real para juzgar si los usuarios manejan bien sus carros. O bien, es posible tener un hogar conectado, manejando con un teléfono inteligente, el encendido y apagado de luces, la temperatura y las alarmas.
Los beneficios de implementar la Internet de Todo podrían ser muchos, según un estudio de Cisco, citado por la agencia EFE, en el que se calcula que Costa Rica ganaría $1.600 millones si pone en marcha esta tendencia en áreas como la medición de gastos eléctricos y el teletrabajo.
En el 2020, habrá 50.000 millones de dispositivos conectados y el 65% de ellos estarán en países en desarrollo.