Ellos son hombres que enfrentan procesos judiciales por violencia doméstica contra sus parejas, pero tienen una característica que los diferencia: accedieron a recibir ayuda y eso cambió su actitud.
Desde abril del 2014 hasta este año, 95 acusados de agredir a sus compañeras han acudido al programa Hombres en Construcción, impulsado por la Fiscalía, el cual procura proteger a las víctimas mediante el tratamiento de los agresores.
El resultado de tal labor se refleja en las palabras de Arturo Arroyo, uno de los participantes: “Aprendí sobre la empatía, la comprensión y el diálogo que se deben tener con la pareja. Comprendí que siempre va a haber problemas, pero el secreto está en saber cómo los vamos a resolver y pensar con cabeza fría”.
El programa está dirigido exclusivamente a hombres mayores de 18 años que enfrentan un proceso penal por esta falta.
Marvin Durán, psicólogo del proyecto, explicó que dicha iniciativa consta de 25 sesiones en las que se abordan temas como el manejo de la masculinidad, el enojo, los celos y el estrés, entre otras emociones.
Entre quienes asisten, hay personas que debieron separarse de sus compañeras e hijos, por lo cual también se les enseña cómo afrontar el duelo que con lleva ese distanciamiento.
Arroyo, quien tuvo que separarse de su pareja, asegura que, con el respaldo del programa, pudo hacer una tregua con ella mantener una relación cordial, basada en el respeto.
“Ella también vio los cambios en mí. Me ha dicho que no soy el mismo gritón, el enojón por todo”, expresó Arroyo .
A su juicio, los más beneficiados son los hijos en común, pues se facilita el sano ejercicio de la paternidad fuera del hogar.
Con ese criterio, coincidió una mujer llamada Marta, cuyo esposo asiste a las charlas.
Mejora. Para ser parte de este plan, los varones que tienen una causa por faltas a la Ley de Penalización de la Violencia contra las Mujeres pueden ser remitidos por órganos como la Defensa Pública, la Fiscalía de Género, el programa de Justicia Restaurativa o la Plataforma Integrada de Servicios de Atención a la Víctima. El ingreso es voluntario.
Hasta el momento, han asistido hombres de entre 19 y 76 años, de diversos niveles de ingreso económico; algunos con educación universitaria y otros que no saben leer ni escribir.
Las charlas se brindan en el Primer Circuito Judicial de San José, de 3 a 9 p. m. La Fiscalía pretende llevar el proyecto a otras zonas. Posteriormente, los encargados les dan seguimiento, para evitar la reincidencia.
Por ejemplo, en un caso, uno de los asistentes llamó al psicólogo en un momento de crisis, por lo que este último alertó a la Policía, pues había terceros en riesgo.
Tanto Durán como el trabajador social Roberto Martínez, han detectado en los asistentes carencia en el sentido de responsabilidad, falta de vínculos afectivos con los hijos y el achacar la culpa a la esposa o a otras personas.
Se consultó al Instituto Nacional de las Mujeres (Inamu) su criterio sobre esta iniciativa, pero la entidad respondió que los representantes se encontraban fuera del país.
El Inamu creó el sitio web www.machistaenrehabilitacion.com, mediante el cual promueve la identificación del machismo a fin de erradicarlo.