A la expresidenta de la República, Laura Chinchilla, no le toma por sorpresa la detención de Gílbert Bell, conocido como Macho Coca, quien se presume era el líder de una organización que se dedica al tráfico cocaína y marihuana entre Limón y San José.
Chinchilla asegura que cuando ella ocupó la Presidencia (2010-2014), el empresario limonense ya estaba bajo la lupa de las autoridades.
“Era conocido que en los círculos policiales se le venía investigando y eso llegó a mis oídos como parte de la estrecha relación que mantuve con los diferentes organismos de seguridad”, expresó la exmandataria vía correo electrónico, ante una consulta de La Nación .
Negó que esa presunta organización delictiva u otra, intentaran incursionar en su gobierno, como sí ocurrió con este.
“No supe de intentos de ese grupo de acercarse a mi gobierno y, de haberme enterado, no lo habría permitido”, declaró.
Macho Coca fue nombrado, en febrero, como miembro de la Comisión Asesora de Limón del Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca).
Gustavo Meneses, presidente de ese instituto, explicó, el 1.° de octubre, en la Comisión Especial de Seguridad y Narcotráfico de la Asamblea Legislativa, que ese nombramiento se hizo por recomendación del director regional de la entidad en Limón, que es de apellido Córdoba y quien se jubiló hace tres meses.
Toma distancia. Al respecto, el presidente, Luis Guillermo Solís, rechazó que tal designación obedeciera a una falla en los protocolos de seguridad, los cuales están a cargo de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS).
Solís alegó que ningún miembro de su gobierno nombró a Bell, sino que fue una recomendación de pescadores de Limón.
“No, no, no. En este caso todo es muy transparente, se recomendó a ese señor de parte de las organizaciones (...). No había una investigación en curso en el Incopesca; ahora sí la hay y será trasladada a la Fiscalía según corresponde”, afirmó el mandatario.
Descartó que la entrada de Macho Coca en Incopesca sea un intento del crimen organizado de penetrar en la política. “No es infrecuente que el crimen organizado se haga revestir de actividades filantrópicas, actividades de tipo Robin Hood. Ahora bien, el tema del señor Bell en Incopesca no tiene nada que ver con eso.
”Yo no puedo calificar cuál fue la intencionalidad de los pescadores al recomendarlo; creo que él tenía un liderazgo en el sector, sin duda; era dueño de alrededor de 60 barcos. Ciertamente, tenía esa capacidad. Si estuvo o no estuvo todo esto articulado por una mano superior, eso no puedo saberlo”, aseveró Solís.
Según el Ministerio Público y el OIJ, Macho Coca es sospechoso de comprar el silencio de cuatro oficiales de tránsito para poder trasegar cocaína y marihuana por la ruta 32, de Limón con San José. La Fiscalía le atribuye los supuestos delitos de tráfico de drogas y de cohecho propio.