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La Policía Judicial y el Ministerio de Seguridad Pública detectaron entre los consumidores de drogas no solo a habitantes de tugurios sino también a profesionales.
En varias ocasiones, las autoridades han sorprendido en las calles, “muchas veces irreconocibles” a médicos, abogados, educadores, arquitectos y psicólogos, entre otros muchos profesionales atrapados por los narcóticos.
“Está en todos los estratos sociales. Hemos detenido con crack a funcionarios judiciales, universitarios, colegiales; nadie se escapa de esa enfermedad”, afirmó Gerardo Láscarez, viceministro de Seguridad Pública.
Recordó el caso de un arquitecto, cuya identidad no dio a conocer, a quien atraparon bajo los efectos de las drogas en la capital.
“También el caso de un estudiante universitario, adicto al crack , quien dejó sus estudios porque no podía dejar el consumo”.
“Ese muchacho era brillante y al poco tiempo se convirtió en el delincuente más peligroso de Ciudad Neily. Asaltaba a cualquiera y una vez hasta se nos metió a los Tribunales de la zona”, añadió Láscarez.
Actualmente descuenta una larga sentencia carcelaria.
El problema, según Jorge Rojas Vargas, director del OIJ, es la ausencia de centros especializados para la rehabilitación de adictos.
“Muchos de esos hombres que vemos tirados en las calles, durmiendo entre cartones, fueron seres productivos, personas de bien ahora vencidos por el crack y deben ser rescatados”, afirmó el jerarca policial.
