Ciudad Neily (Corredores). Quienes mataron a un hombre, hasta ayer no identificado, justificaron el hecho en un papel dejado al lado del cuerpo, que decía: “Por robar 30 kilos de coca”.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y la Fuerza Pública informaron de que este hallazgo se produjo el sábado a las 4:10 p. m. en una plantación de palma africana en Coto 41 de Corredores, Puntarenas.
Además, entre las evidencias localizadas había otro papel en el cual escribieron: “Ahora sigue la familia”.
De acuerdo con el informe de las autoridades policiales, el cuerpo, que estaba en avanzado estado de descomposición, tenía una cadena en el cuello, las manos y los pies.
Asimismo, los homicidas colocaron cinta adhesiva y amarras plásticas en las manos. Igualmente, pusieron un pasamontaña en la cabeza.
La Policía confirmó que el cuerpo estaba bocarriba y presentaba impactos de bala en el rostro y la nuca.
En el sitio no se halló ningún documento con el nombre de la víctima, que vestía una camiseta de color naranja, jeans y tenis blancos con verde.
Carlos Núñez, subjefe de la Fuerza Pública en Corredores, dijo que se presume que el hombre tenía varios días de fallecido por el alto grado de putrefacción.
Sin embargo, agregó que será la autopsia la que determine cuándo fue el crimen. Como un dato más, explicó que el sitio donde dejaron el cuerpo es muy seco y caliente y eso podría haber acelerado la descomposición.
Desaparecido. La Policía no descarta que la víctima sea de nacionalidad panameña. La frontera está a 22 kilómetros. Asimismo, trascendió que en la zona sur se maneja la información de al menos un hombre desaparecido.
Se trata de un joven de apellido Rodríguez, taxista pirata. No se ha vuelto a saber nada de él desde el 16 de octubre pasado, cuando salió a prestar un servicio. El vehículo que utilizaba tampoco apareció.
En todo caso, el OIJ solicitó a la ciudadanía que si alguien tiene detalles sobre la identidad del hombre o datos de lo ocurrido, llame al Centro de Información Confidencial, cuyo teléfono es el 800-8000-645.
Para las autoridades, este homicidio tiene todas las características de un ajuste de cuentas por un lío entre organizaciones narcotraficantes.