El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) continuaba ayer tras la madre de la recién nacida encontrada el martes en un basurero en Florida de Tibás.
La Policía Judicial comunicó que la mujer sería sospechosa de tentativa de infanticidio.
Sin embargo, hasta ayer los agentes no tenían a ninguna persona identificada o pistas claras sobre lo sucedido, por lo que pidieron a la ciudadanía brindar cualquier información que ayude en el caso.
Entre tanto, la bebé está fuera de peligro y se mantiene en el Hospital Nacional de Niños (HNN), donde, además de atención médica, recibe mucho cariño de los funcionarios.
“Si pudiera alterar una tómbola para ponerme de primero en la fila de adopción, lo hago”, dijo el director a. í. del HNN, Orlando Urroz.
Esas declaraciones las dio el jefe médico en una conferencia de prensa que ofreció en su despacho, junto con el Cuerpo de Bomberos.
En la convocatoria fue evidente que el resto del personal compartía su sentir.
“La querían esconder y ha generado todo esto”, exclamó una mujer del grupo de médicos, enfermeras y administrativos presentes.
“Ya eligieron el nombre: Luciana”, dijo otro de los presentes.
“Aunque tengamos muchos años de trabajo en el Hospital, a todos nos estremece lo que pasó”, comentó Urroz, quien, además, dijo que se convertirá en el padrino de la niña.
La bebé se mantiene en el ámbito de Medicina 4 del Hospital; pesa 2.400 gramos, es algo rubia y tiene “unos ojos divinos”, según contó Olga Arguedas, jefa de Medicina del Hospital y quien será su madrina.
La niña ya está en condición de egreso, pero permanecerá en el centro médico en observación hasta el lunes o martes. Colaboró Hulda Miranda.