Una avioneta, matrícula TI-AZN, se estrelló la mañana de este lunes en una laguna de oxidación de la Compañía Industrial Aceitera, ubicada en Coto 54, en Corredores de Puntarenas.
Así lo informó el Cuerpo de Bomberos, el cual detalló que en la aeronave solo viajaban dos personas: el piloto, identificado como Luis Araya y el pasajero, Jorge Villalobos, quienes no sufrieron ninguna herida de consideración.
El accidente se presentó a las 7:14 a. m. y a las 8:23 a. m. los equipos de rescate declararon la emergencia bajo control. El monomotor Cessna, modelo 206H Stationair, que pertenece a la compañía Aires Pavas, salió del aeropuerto Tobías Bolaños, en San José, con Coto 47 como destino. Era un vuelo de taxi aéreo.
"Se nos informó de una aeronave que cayó en medio de la laguna con dos ocupantes, los cuales fueron trasladados al Hospital de Ciudad Neily por la Cruz Roja en condición verde (golpes leves)", manifestó Andrés Céspedes, supervisor de turno de Bomberos. Allí fueron dados de alta.
Roberto Jara, de Bomberos, quien se presentó al sitio del accidente, contó al medio Colosal Informa que los ocupantes salieron del aparato por sus propios medios.
Hernán Arguello, un trabajador que estaba cerca de la laguna, declaró a ese medio de comunicación que él observó cuando el Cessna cayó en la laguna. "Vi que la avioneta venía muy bajito, pensé que venían a inspeccinar la laguna y en eso vi que se precipitó ahí". Él corrió hacia el sitio, ayudó a los dos ocupantes a salir y a reportar al 9-11.
La nave se hundió parcialmente, prácticamente al revés, y luego fue sacada de ahí por una grúa de una empresa aceitera.
De momento, se desconocen las causas del accidente, pero las autoridades abrieron una investigación.
Otro incidente.
A las 8:15 a. m. también se registró un incidente con una aeronave de una escuela de aviación. La avioneta Cherokee, matrícula TI-BEZ, fabricada en 1978, según los registros en La Gaceta, tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia debido a una pérdida de potencia en el motor, informó Juan Luis Vargas, jefe del Servicio de Vigilancia Aérea del Ministerio de Seguridad Pública.
Tanto el piloto como el estudiante que viajaban en la aeronave resultaron ilesos.
El martes 5 de setiembre, precisamente, otro Cessna 206 H, con seis personas a bordo, que hacía un vuelo de Pavas a Liberia y Tamarindo, se estrelló poco después del despegue. Dos de los pasajeros fallecieron. Se trata de María Elena Umaña Chacón, una administradora turística de 54 años, y el estadounidense nacionalizado costarricense, Randall Lindner, de 70 años.
La nave, matrícula TI- AGM, solo logró volar 500 metros hasta caer sobre el cauce del río Torres.
Información actualizada a las 4:05 p. m. Colaboró el periodista Carlos Arguedas.