Una pugna entre dos familias vecinas dejó ayer una mujer herida de bala y cuatro policías con lesiones provocadas por piedras.
El hecho se produjo a las 6 a. m. en la alameda C5, bloque 20, de Finca San Juan en Pavas, al oeste de San José.
Testigos dijeron que el incidente comenzó a gestarse desde la noche del viernes, cuando en la vivienda de una mujer de apellido Valladares, de 40 años, varios jóvenes estaban ingiriendo licor.
Luego, al amanecer, quienes se hallaban ahí la emprendieron con una familia vecina, en cuya casa vive un hombre apellidado Garita, de 57 años de edad.
Pleito viejo. Supuestamente, entre ambas familias, desde hace cerca de un año, se han presentado varios incidentes que han terminado en riñas.
Sin embargo, ayer a las 6 a. m., tras varios gritos y golpes a las paredes, Valladares, presuntamente, empezó a patear la puerta de la casa de Garita, quien salió con un arma de fuego y, al parecer, le disparó en el abdomen a Valladares.
Al observar el hecho, familiares y amigos de la mujer la emprendieron contra Garita, su esposa y tres menores de edad, e incluso amenazaron con prender fuego a la casa.
Oficiales de la Fuerza Pública de Pavas se presentaron en el lugar de los hechos, donde detuvieron a Garita y le decomisaron el revólver, calibre 38, pero fueron atacados con piedras y palos.
En el incidente resultaron con golpes en diversas partes del cuerpo los policías Emanuel Gómez, Marlon Cascante, Edwin Valverde y José Manuel Meza, quien debió ser trasladado al hospital San Juan de Dios por una herida en el rostro.
Edwin Torres, jefe del puesto policial de Pavas, manifestó que, con el apoyo del grupo antimotines, debieron entrar a la vivienda del detenido para a sacar a su esposa y a los menores de edad, con el fin de darles protección pues la situación se puso muy tensa.
Incluso, la turba lanzó piedras contra los vehículos policiales y también amenazó con apedrear los autobuses.
La familia de Garita fue reubicada ayer en Pavas.
Debido a la agresión a los policías, se detuvo a un muchacho de apellido Obando, de 19 años, y un menor de edad, de 14.
Valladares permanecía ayer delicada en el San Juan de Dios.
