Costa Rica necesita urgentemente una Cámara Nacional de la Belleza. Ya ha sido suficiente con tener que lidiar con feos que no solo se permiten recorrer nuestras calles con vestimenta más repugnante que el cuerpo que sus madres les dieron, sino que algunos hasta osan representar al país en el extranjero.
Hacen bien Bloguera Monda, Tuitero Mero y Televidente Roca en utilizar su poder de lobbying para atacar este endémico problema de la fealdad, primero con la creación de una entidad que regule nuestras representaciones en concursos de belleza y que legisle la gracia en el espacio público, y segundo –eventualmente– dividiendo el territorio en Costa Rica y Costa Sosa, como dios manda.
Los representantes del movimiento –que según ellos debió gestarse desde 1950, “cuando empezaron a llegar más latinos que gringos y europeos”– manifestaron que el país ha cometido errores “imperdonables” en materia de exportación de belleza y que ello debería acabar pronto, antes de que no quede respeto por el nombre de Costa Rica.
Ponen de ejemplo a Keylor Navas: “Pudimos haber entrenado de igual manera a cualquier otro portero que fuera un poco más refrescante, más agraciado. Es que hay que buscarlos desde niños; ¡es el Real Madrid, por dios!”, dijo enojado Mero, moviendo sus brazos como si estuviera alzando pesas. “Todos sabemos que si Keylor fuera guapo tendría Guante de Oro, pero igual el error es nuestro por no prever el problema desde hace décadas”.
Ni qué decir de la mayoría de ganadores de los 1.259 concursos de belleza locales (y contando). Tampoco se explican cómo los guapos deben compartir bus con taaantos feos, “pero eso se resolverá cuando manden a todos los feos y los buses a Costa Sosa, y dejen a los guapos y los carros aquí. Claro, vamos a construir un muro”, reveló Roca.
No obstante, la gota que derramó el vaso fue el Mister Costa Rica que viajó hace una semana al concurso Mister Real Universe: “Era un estornaco. Estuvimos a punto de un suicidio colectivo de guapos cuando vimos la noticia, pero luego recapacitamos y buscamos poder político para cambiar el mundo”, expresó Monda. Ese cambio de parecer los tiene a las puertas de abrir la primera Cámara de la Belleza de Costa Rica.
Las medidas preventivas ya comenzaron. Iglesias a lo largo del país imparten cursos sabatinos de presentación personal y prohiben el ingreso informal a las cúpulas, así como divulgan información bíblica de por qué tener una autoestima más alta que la belleza real es pecado. Por otro lado, Canal de Costa Rica comentó en un editorial que está “limpiando” la lista de presentadores para seguir operando en Costa Rica, “pero en realidad casi no tenemos feos frente a cámaras, entonces todo bien”.
Activistas de Facebook y Blogspot llaman a apoyar la iniciativa y defender el derecho de los costarricenses a una buena representación en concursos estúpidos, a rodearse solo de personas de bien y a señalar los desperfectos humanos sin evitar burlarse de las cualidades físicas de los demás, porque como dice Tigre Tony “así somos los ticos”.
La modelo frustrada Carolina Argollas publicó en un emotivo mensaje en Facebook que este movimiento la llena de ilusión, en tanto reune a personas que normalmente se odian “gracias a la superficialidad que nos obliga a olvidar la insignificancia de la existencia”. Argollas terminó con esperanza: “Ser guapo está en la mente, porque es cosa de quererlo y trabajar por ello. Hay que invertir tiempo y dinero, pero si sos guapo podés vivir en Costa Rica, y no hay premio más gratificante”.