En el 2013, Sam Simon, uno de los creadores de Los Simpsons , anunció a la opinión pública que le habían diagnosticado un cáncer terminal de colon.
Desde ese momento, el productor se ha dado a la tarea de ir donando los más de cien millones de dólares que forman parte de su fortuna a distintas organizaciones benéficas.
Su pasión son los perros, así que creó una fundación que lleva su nombre, y que trabaja en el rescate de estos animales que ha sido abandonados. Además, su ayuda se extendió a Peta y a Save the Children.
Simon, quien dice estar en sus últimos días de vida, aseguró que quiere lograr que su enfermedad trascienda y que más personas se unan y trabajen en ayudar a quienes más lo necesitan.
Aunque en 1993 tomó la decisión de separarse del proyecto televisivo, el productor sigue recibiendo gran cantidad de regalías económicas por la popularidad de Los Simpsons.
Él desea compartir un poco de la felicidad que ha vivido en sus 59 años, así que espera que su muerte trascienda el dolor para traer mucha alegría y sonrisas a quienes se beneficien con sus distintas donaciones.
“De alguna manera con mi enfermedad terminé rodeado de gente que me quiere y cuida de mí y harán cualquier cosa para mí. Eso se llama felicidad. Creo que todo tiene un proceso, así que no lamento el haberme ido antes”, expresó en una entrevista con la cadena NBC.