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Los Ángeles
El exclusivo club de princesas de Disney ha llegado lejos desde que Blanca Nieves debutó en 1937, expandiéndose gradualmente para agregar a integrantes asiáticas, afroamericanas, indias y árabes. Prepárense para reverenciar ahora a Elena, la primera latina que asciende al codiciado trono.
Su reino es Elena de Avalor, una serie animada de Disney Channel que se estrena el viernes con un especial de una hora. Aunque Elena no es una realeza de la gran pantalla como Anna y Elsa de Frozen, ella y su serie de 26 episodios están recibiendo un majestuoso trato en lo que a mercadotecnia se refiere por parte de Walt Disney Co.
Grupos defensores de los latinos y los derechos civiles dicen que su impaciencia finalmente ha sido recompensada.
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"Ya era hora de que Disney tuviera una princesa latina", dijo Lisa Navarrete, vocera del Consejo Nacional de La Raza. "Aun cuando no es la prioridad principal para una organización de derechos civiles, es importante que las niñas pequeñas se vean a sí mismas en pantalla".
Sus palabras las apoya Alex Nogales, presidente y director ejecutivo de la Coalición Nacional de Medios Hispanos. El grupo ha buscado activamente la diversidad en Hollywood y, al igual que La Raza, estaba presionando para que Disney tomara el paso.
Nogales dijo que su hija de 4 años, Chloe, se lo recordó recientemente cuando asistieron a una presentación especial de la serie. "Se parece a mí. Tiene ojos marrones, y mírale la piel", recordó las palabras que la pequeña le dijo sobre Elena, una adolescente lista y vivaz que refleja la nueva ola de princesas fuertes de Disney.
"Nuestros niños están siendo reflejados a través de la pantalla y eso les afecta de una manera muy positiva", señaló Nogales, a diferencia de lo que ella veía en su infancia.
El estilo y sonido de la serie se modeló en base a una variedad de culturas latinas e hispanas nuevas y antiguas, mientas que sus diálogos son un inglés salpicado por palabras y frases en español, como un cariñoso "mija".
Elena, cuya voz hace la actriz dominicana Aimee Carrero, es una heroína atractiva para una audiencia de entre 2 y 11 años, que combina inteligencia, empatía y osadía con el uso de un amuleto mágico.
"Veo a las princesas como superheroínas con tiaras para niñas pequeñas", dijo el creador y productor ejecutivo de la serie, Craig Gerber, cuyos créditos también incluyen Sofia the First de Disney. "Cuando uno crea un personaje que puede ser visto como un modelo de conducta, tenemos la responsabilidad de crear un personaje que valga la pena admirar".
Disney estaba entusiasmada con la propuesta televisiva de Elena, sobre una chica que debe conformarse con liderar como princesa hasta tener la madurez suficiente para asumir su debido título de reina, dijo. Incluso antes de su debut, la compañía apoyó su compromiso con productos (muñecas, accesorios, ropa y un próximo disco y DVD) y la inclusión del personaje de Elena en el parque temático de Florida Walt Disney World Resort este verano y en el Disneyland Resort de California en el otoño.
"Esto definitivamente muestra lo importante que es este proyecto, no solo para Disney Channel sino para la compañía en general", dijo Nancy Kanter, vicepresidenta ejecutiva y gerente general de Disney Junior Worldwide.
Tras su debut en Estados Unidos, la serie llegará a 163 países a través de los canales Disney Channel y Disney Junior.
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Elena de Avalor comienza con un recuento rápido de los terribles acontecimientos que la llevaron a asumir el poder a los 16 años. También presenta su pequeño y amoroso círculo familiar, que incluye a su hermana menor, la princesa Isabel (Jenna Ortega), y a sus abuelos que la adoran, Francisco y Luisa (Emiliano Díez, Julia Vera), así como la naturaleza del mundo en el que se reside (uno mágico, por supuesto). Otros personajes incluyen a un aprendiz de mago tipo Harry Potter, Mateo (Joseph Haro), y a la hija del capitán del puerto, una rubia valiente llamada Naomi (Jillian Rose Reed) que se hace amiga de Elena.
La principal guionista, Silvia Cárdenas Olivas, está preparada para el escrutinio de su flamante princesa. Ya lo ha recibido de sus amigas latinas, que incluyen mujeres de ascendencia cubana, dominicana y puertorriqueña. Sus dudas: "¿Cómo vas a hacer para que todas sintamos que ella puede ser nuestra princesa?".
"Voy a ser honesta, siento una responsabilidad tremenda para hacerla bien, para que todo el mundo, sea latino o no, se identifique con ella", dijo Olivas.
Con la ayuda de animación computarizada se creó un reino de cuento de hadas que, basado en la investigación de asesores, refleja varias culturas e influencias desde las eras precolombina y colonial, dijo Gerber. Lo mismo pasa con los habitantes de Avalor y sus visitantes, como Zuzo, guía espiritual de Elena inspirado en la creencia de una tribu maya, y personajes que cambian de forma inspirados en mitología chilena, pero con un toque de ternura de Disney.
La música que se incluye en cada episodio ("Elena toca guitarra y canta, algo que toda princesa de Disney debe hacer", dijo Gerber) cubre una variedad de ritmos latinos que incluyen mariachi, salsa y banda, y se extiende al R&B, el rock y el pop.
¿Debía la primera princesa de Disney tener un reino más grande en el cine? Kanter dijo que Elena de Avalor se concibió como una serie de TV, lo que "podría ser un modo verdaderamente impactante de contar no solo una historia sino docenas y potencialmente muchas docenas de historias a lo largo un gran periodo de tiempo". Pero eso no quita que pueda dar un salto a la gran pantalla, dijo Nogales. "Alcanzaría otro nivel en términos de resaltar a una latina en los medios", señaló.
