Producir un montaje teatral requiere preocuparse por el tiempo: cuánto tiempo se necesita para tener listo el espectáculo, cuánto tiempo tendrá el equipo para ofrecerlo a su público.
En Decime que tenemos tiempo , el Grupo Ubuntu explora la presión de sacar aprovechar las horas sin remordimientos.
La obra ofrecerá funciones de semana hasta el 17 de julio en La Casona Iluminada.
“Me enamoró el texto desde que lo leí porque toca diferentes temas y líneas”, explicó el director Armando Solano. “El mensaje final, independientemente si lo queremos aplicar en el tema laboral, sentimental o familiar. es que el momento es ahora”.
El libreto fue escrito por el dramaturgo peruano César de María. La historia gira en torno a dos actrices, Mariví (Vanessa Vargas) y Valentina (Jazmín Nájera), quienes deben confrontar distintos problemas profesionales y personales.
En el plano profesional, su principal problema es dedicarse al arte que aman, a sabiendas de que podrían haber riesgos económicos si no participan en proyectos de teatro más comercial.
Solano considera la propuesta como un reflejo actual: “Es una crítica dura en ese sentido”, asegura. “Ellas son conocidas en su mundo ficticio como payasas, no como actrices. Aunque se digan actrices, no son consideradas como tales sino como dos comediantes. Se trata de hasta que punto estoy dispuesto a sacrificar mi mensaje, lo que quiero decir con la obra, porque simplemente necesito dinero.
“En la sociedad costarricense, nos pasa. A veces nos cuesta llenar una sala de 80 campos como el Teatro Giratablas –local donde estrenaron el montaje–y en las salas comerciales las filas son inmensas”, dice el director.
En el ámbito personal, Mariví y Valentina tendrán que explorar sentimientos románticos mutuos que, al comienzo de la obra, no están listas para externar. Eso cambia conforme sus personajes crecen en el escenario.
Para investigar este tema, el grupo recopiló historias les de conocidos que lamentaban no haber tenido el tiempo para comunicarse con sus seres queridos.
“La obra toca la importancia del hoy, del presente, que no sabemos cuándo dejaremos de tener tiempo y hay que aprovechar cada segundo”, destaca Solano.