Londres
La madre de la cantante británica Amy Winehouse, Janis, encontró a su hija ebria y rodeada de botellas vacías en su casa londinense un día antes de su muerte, según revela en un libro cuyo contenido adelantaron este jueves los medios británicos.
Janis Winehouse describe en Loving Amy la última visita que hizo a su hija, un día antes del 23 de julio del 2011, cuando la cantante, de 27 años, fue hallada muerta por la policía.
La madre de la intérprete de Back To Black describe cómo su hija no podía bajar sin ayuda las escaleras de su casa, un apartamento repleto de botellas de vino blanco rotas.
El guardaespaldas de la cantante, Andrew Morris, abrió la puerta a Janis y subió a la planta superior para avisar a Amy.
"En cuando Andrew apareció, vi a Amy colgada de su hombro", relata la madre, para la que resultaba "obvio que el guardaespaldas la había lavado y vestido para que estuviera presentable".
La cantante apestaba y el alcohol le salía por cada uno de sus poros, describe su madre, que dedica su tiempo a trabajar para la fundación que lleva el nombre de Amy Winehouse, enfocada en prevenir los efectos del mal uso del alcohol y las drogas en los jóvenes.
"No podía quedarme sentada allí viendo el estado en el que se encontraba", recuerda Janis en su libro, que sale a la venta en el Reino Unido el próximo 11 de setiembre y cuyos ingresos irán destinados a esa fundación.
Según la segunda revisión judicial de la muerte de Winehouse, que se hizo pública en agosto del 2013, la cantante falleció debido a unos niveles letales de alcohol que consumió de manera voluntaria.
Este verano se anunció que se va a erigir una estatua de tamaño real como homenaje la cantante en el mercado de Camden, cerca de su antigua residencia.
"Me he reunido con el Ayuntamiento de Camden y me dijeron que aunque normalmente no permiten que haya estatuas hasta 20 años después de que alguien fallezca, el caso de Amy es una excepción", informó su padre, Mitch Winehouse.