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Al menos por esta vez, la Iglesia, el Opus Dei y los Iluminati pueden respirar tranquilos. Con Inferno (2016), nueva película que se estrena hoy en los cines ticos, Dan Brown no se mete con ellos ni mucho menos el profesor Langdon.
Inferno , el tercer libro de Brown adaptado al cine después de El código Da Vinci (2006) y Ángeles y demonios (2009), deja de lado las ficciones y conspiraciones religiosas para basar su historia en la simbología oculta de la Divina Comedia , la obra clásica de Dante Alighieri.
De hecho, el nombre de la cinta es el mismo de la primera de las tres cánticas de la obra maestra del poeta florentino: Inferno .
El creciente problema de la superpoblación mundial –según plantea el texto de Brown–, y una letal conspiración mundial son el corazón del nuevo thriller.
Por esta razón, la nueva misión del doctor Robert Langdon (Tom Hanks) no está en Roma, sino que se muda a Florencia. Allí, el misterio y el suspenso de la historia tienen su nido.
“Florencia es una ciudad hermosa. Inventarse un plan malvado aquí es una empresa imposible, porque solo hay belleza, misterios y acertijos”, comentó Ron Howard, que dirige la película al igual que lo hizo con El código Da Vinci y Ángeles y demonios.
Sin embargo, es así. La encantadora ciudad de los Médicis, cuna en el siglo XIV del Renacimiento, oculta un plan macabro y por eso se convierte en la protagonista central de la película.
Así comienza el misterio.
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Un día de tantos, el doctor Langdon se despierta con amnesia en un hospital. Allí le atiende la doctora Sienna Brooks (Felicity Jones), quien le ayudará a recobrar la memoria y evitar la propagación de un virus que amenaza a la mitad de la población mundial.
En esa línea, Brooks y Langdon participan en una carrera contra reloj entre Florencia, Venecia y Estambul, para frustrar el malvado plan de un científico decidido a exterminar el 90% de la humanidad.
El perturbado científico se llama Bertrand Zobrist, el malo de la película encarnado por Ben Foster ( Warcraft: El Origen y 3 :10 to Yuma ).
Según Howard, la mente ofuscada de Langdon es atormentada por este tipo obsesionado con Dante Alighieri. De esa manera, Zobrist obligará al protagonista a seguir las pistas y descifrar cada indicio que deja en el pedregoso camino.
Todo lo hará Langdon con un noble objetivo: evitar que se desate el infierno en la Tierra.
Denuncia. Para Tom Hanks, el tema que toca Brown en Inferno es un tema muy serio y se verá reflejado en la pantalla grande.
“En la cinta, Dan Brown nos cuenta el infierno que hemos creado en la tierra. Dante describe en sus cantos un lugar específico, mientras que la película cuenta cómo el terrorista quiere cambiar lo que considera un infierno”, comentó Hanks, durante la presentación oficial del largometraje en Florencia.
Y ese infierno lo representan los problemas medioambientales, las personas esclavizadas y la ya mencionada sobrepoblación, tema que finalmente termina convirtiéndose en el hilo conductor del filme.
“La película aborda ese problema, porque si tuviéramos que rodar cada escena del libro hubiera durado 35 horas”, explicó Brown, uno los autores que más ha vendido libros en todo el mundo.
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Sus récords comerciales son impresionantes: el escritor estadounidense ha colocado unos 200 millones de ejemplares en manos de sus lectores.
Por si fuera poco, entre la adaptación fílmica de El Código Da Vinci y Ángeles y demonios se han recaudado unos $1.200 millones.
A su consideración. Aunque The Hollywood Reporter insiste en que Inferno “es la mejor película de la franquicia hasta la fecha”, sus colegas no parecen pensar lo mismo.
La cinta tiene un 49% de opiniones positivas en el sitio metacritic.com y los expertos la entierran calificándola de aburrida y predecible.
“Aparte de algunos rastros puntuales del encanto de Hanks como Langdon, todo amenaza con ser opresivamente aburrido”, apuntó Empire .
Variety , por su parte, lo resume así: “La tercera adaptación de Ron Howard, de una novela de Dan Brown, permanece fiel a la letra y el espíritu de su fuente, aunque eso no es necesariamente un cumplido”.
Pero la última palabra sobre la calidad del filme la tendrán sus fans, que a partir de hoy podrán ver la nueva aventura del profesor Langdon de una forma muy diferente: en formato 4DX y DBOX.
Es decir, las típicas sensaciones que transmite Dan Brown en sus escritos, podrán sentirse a flor de piel con las ventajas de las nuevas tecnologías de proyección.
Eso sí, si quiere ver Inferno tome en cuenta que solo puede ser vista por mayores de 15 años.
