El conflicto legal que enfrenta la compañía Gas Zeta agobia a unos 350 empleados, quienes dependen de esta firma en el país, la cual, en los últimos días solo brinda suministro del carburante a un 40% de sus clientes.
“Estamos sumamente preocupados por nuestro futuro dentro de esta empresa. Somos empleados que tenemos a cargo familias y la preocupación es también con los consumidores”, dijo Eladio Gómez, trabajador allí hace 13 años.
Las declaraciones se dieron ayer en una manifestación pacífica, organizada por un grupo de 150 empleados de Gas Zeta, en un plantel en La Uruca.
Ellos se quejan de “las trabas legales que existen para poder suministrar el gas, con total normalidad a los comercios”.
Desde el 23 de abril, el Ministerio de Seguridad frenó la entrega de dos plantas envasadoras (La Lima de Cartago y El Coyol de Alajuela) de Gas Zeta.
Riesgo. Esta situación ocasiona problemas de abastecimiento de gas en el país, por lo cual también los empleados advierten de que, si el caos persiste, se complicará el funcionamiento de los comercios más pequeños.
El presidente de la Cámara Costarricense de Restaurantes y Afines (Cacore), Jorge Figueroa, manifestó que le preocupa la situación que enfrenta Gas Zeta, puesto que pone en riesgo los restaurantes y su capacidad de operación.
En estos momentos, la firma opera gracias a las plantas ubicadas en Guápiles, Bagaces y Limón, pero tienen que hacer un traslado diario del producto hacia el área metropolitana, lo que genera pérdida de tiempo y recursos a la compañía.
Los trabajadores de Gas Zeta enviaron ayer un comunicado a la Presidencia de la República, en el cual solicitan la intervención del Ejecutivo para solucionar el caso cuanto antes.
“Deseamos recalcar que los 350 colaboradores de la empresa nos identificamos con la responsabilidad social que conlleva el servicio ofrecido por nuestra compañía, pero, a lo largo de estos últimos días, hemos encontrado tropiezos, trabas, acuerdos sin fundamento, irrespeto, amenazas”, manifestó Ana Irene Villalobos, gerenta de Recursos Humanos de Gas Zeta.
La Presidencia respondió ayer mediante un comunicado de prensa, en el que se reitera que la responsabilidad de la distribución y entrega del gas es de las empresas concesionarias.
“Hay un diferendo privado en Gas Zeta que debe ser resuelto según el cumplimiento de órdenes judiciales, las cuales no son de control del Poder Ejecutivo”, señala el boletín.
La otra empresa, Gas Tomza, opera con normalidad y abastece a un 28% del mercado.