La escasez de lluvias registradas en el 2013, especialmente en la región del Caribe y la zona norte, mantiene las alarmas encendidas para los primeros meses de este año porque la situación podría repetirse.
Entidades como el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) ya han tomado algunas medidas para enfrentar las secuelas de una eventual falta del recurso hídrico.
De acuerdo con las proyecciones del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), el año pasado fue el tercero consecutivo en el cual no se supera la precipitación media anual y estacional (diciembre-febrero) en la vertiente del Caribe.
Eso ocasionaría un impacto negativo en actividades socioeconómicas como la agricultura, disponibilidad de agua para consumo humano y generación hidroeléctrica.
Tanto en la región Caribe como en Los Chiles, Alajuela, –al corte efectuado a finales de noviembre– se había registrado hasta un 30 por ciento menos de lluvia de lo acostumbrado en algunos sectores, reconoció Juan Carlos Fallas, director general del IMN.
Al parecer, la situación se podría mantener muy parecida durante los primeros meses de este año que empieza.
Agro en la mira. Si bien es cierto que los agricultores y ganaderos de Guanacaste y del Pacífico central están acostumbrados a lidiar con los embates de fuertes veranos, los del Caribe y la zona norte no tienen esa experiencia.
Por eso, el MAG está activando en esos lugares medidas preventivas, especialmente en capacitación dirigida a los grandes, medianos y pequeños productores, aseguró Érick Quirós, director superior de Operaciones Regionales de ese ministerio.
El funcionario explicó que el faltante de lluvias en el verano tendrá secuelas casi inmediatas entre quienes se dedican a la lechería y a la ganadería porque se ven afectados los pastizales, y esto impactará la alimentación del ganado.
A los productores se les está recomendando utilizar un pasto más fuerte, emplear alimentos sustitutos y disminuir el número de animales, en caso necesario.
Otros problemas. La falta de lluvia también afecta a cultivos de ciclo corto, como el frijol.
Los agricultores se están viendo obligados desde ahora a variar la fecha de siembra y cosecha.
La propagación de plagas atribuidas al cambio climático es otro factor que debe mantenerse bajo vigilancia durante esta estación seca para evitar pérdidas cuantiosas.
Con los cultivos de ciclos más largos, como la caña de azúcar, los cítricos y la palma aceitera, el temor se cierne sobre la cosecha del 2015, esto en caso de que el faltante de lluvias continúe más allá de mayo y junio, enfatizó Quirós.
En algunas de las bananeras –agregó–, ya se han hecho inversiones significativas para mejorar los sistemas de riego.
“Aparte de incentivar un uso más racional del recurso hídrico, capacitar a los ganaderos y agricultores para que sepan cómo salir adelante a pesar de la escasez de lluvias, para el 2014 queremos utilizar el sistema de mensajería celular y enviarle información a los productores relacionada con este y otros temas”, recalcó Quirós.
Electricidad garantizada. El ICE es otra institución que durante todo el 2013 tomó previsiones para garantizar el servicio de electricidad a pesar de la disminución de las lluvias. Así lo hará durante el 2014, prometió el gerente de Electricidad, Luis Pacheco Morgan.
Según dijo, se mantiene una vigilancia extrema sobre los embalses para garantizar el suministro de luz proveniente de la generación hidroeléctrica y se espera que, por ejemplo, el embalse Arenal (su principal reservorio de agua), haya cerrado el 2013 con un nivel de 540,5 metros sobre el nivel del mar.
Aunque se trata de seis metros menos que su capacidad total, es suficiente para abastecer la demanda. Aparte del uso de la energía geotérmica (que ha ido en aumento), el gerente de Electricidad explicó que para la estación seca se hará un mayor uso de la energía eólica (producida por viento).
Pacheco manifestó que esperan que las negociaciones para comprar o intercambiar energía con otros países de Centroamérica fructifiquen este año.
A pesar de que el ICE ha tomado estas medidas y confía en que no se presenten apagones ni racionamientos este año, Pacheco hizo un llamado a los consumidores con el fin de que optimicen el consumo de electricidad.
Informes sobre agua. En este mismo sentido, la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos solicitó a los operadores del servicio de agua potable que presenten, con prontitud, un informe sobre las acciones que van a implementar para reducir la afectación del verano en el suministro del líquido.
El año pasado, la sequía obligó a Acueductos y Alcantarillados (AyA) a racionar.