Un contingente de la Fuerza Pública ingresó antes de las 6 p. m. a los puertos de Moín y Limón, para reabrir las instalaciones que se encontraban cerradas desde las 8:30 a. m. a causa de la huelga de trabajadores de Sintrajap.
Los policías abrieron los portones de la terminal muellera y detuvieron a 68 dirigentes o afiliados del Sindicato, dijo Celso Gamboa, ministro de Seguridad. En el operativo participaron 132 policías.
En el muelle había tres microbuses de la Fuerza Pública y presencia de antimotines, pero estos no habían sido usados.
Los personeros del sindicato reaccionaron con tranquilidad. Algunos se movilizaron hacia la sede del Sindicato en el centro de Limón.
Carlos Brenes, uno de los representantes del sindicato, dijo en horas de la tarde que, si la fuerza pública ingresaba al puerto, habría problemas.
Después de las 6 p.m ., ingresó un furgón de la Fuerza Pública que instalará el campamento de la Policía.
La organización laboral de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva) protesta contra el contrato de concesión mediante el cual la firma holandesa, APM Terminals, construiría una nueva terminal de contenedores en Moín y la operaría por 33 años.
Ellos se oponen a una cláusula que le otorga a la compañía la exclusividad para atender barcos de contenedores en el complejo portuario de Limón.