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Santa Cruz, Guanacaste. El Concejo Municipal de Santa Cruz conoció un informe del grupo de arquitectos Abdalla S.A. que señala a cuatro empresas, de ocho interesadas, como las idóneas para operar la Marina Flamingo.
El documento señala que se hizo un análisis de las ofertas presentadas ante el gobierno local. De acuerdo con los requisitos que exige el cartel de licitación, Desarrollos Náuticos, Messe, Inversiones Rigilcom y Tamarindo Life Style son las empresas que obtuvieron el puntaje más alto en la evaluación preliminar.
Desde el año pasado, Abdalla S.A. asesora al ayuntamiento en el proceso de adjudicación de la marina. “Sabemos que el tema de marinas es muy delicado. La legislación para concesionar este tipo de proyectos es complicada, por lo que también contamos con las recomendaciones de la Comisión Interinstitucional de Marinas y Atracaderos Turísticos (Cimat), explicó Jorge Chavarría, alcalde municipal de Santa Cruz.
Prioridad en Santa Cruz. Chavarría expresó que sacar a flote la Marina Flamingo es una de las prioridades de la comuna pues los regidores están conscientes de que la operación de ese atracadero, ubicado en bahía Potrero, es vital para incrementar, aún más, el desarrollo turístico y económico de esa zona costera.
“Conocemos de un estudio efectuado por el ICT cuando se realizó el cierre definitivo de la marina, hace más de tres años, el cual refleja el impacto que tuvo entre el sector hotelero y entre quienes trabajaban directamente en ese atracadero. Familias de más de diez comunidades cercanas se vieron afectadas”, agregó Chavarría.
El presidente municipal, Adrián Rojas, dijo que el proceso de preselección se abrió en diciembre pasado y concluyó el 9 de febrero. Abdalla dio a conocer los resultados hace una semana.
Las empresas que aspiran a operar la marina deberán garantizar, entre otros aspectos, un mínimo de 75 campos para barcos y deberán contar con capital para invertir de aproximadamente $12 millones en infraestructura.
La Marina Flamingo fue cerrada después de varias denuncias que llevaron al Tribunal Ambiental Administrativo a solicitar la suspensión total de su operación.
El cierre definitivo se ejecutó el 12 agosto del 2003.
