En la última vuelta de este cuatrienio legislativo y con las elecciones del 2018 de frente, el PAC y el PLN se están tomando de la mano para decidir el futuro de los aumentos de impuestos que el Gobierno pretende desde hace dos años.
El posible incremento tributario, dice el partido en el poder, iría amarrado a una reforma en empleo público más moderada que la pretendida por el bloque de oposición que se formó el año pasado, encabezado por los liberacionistas. Hoy, los verdiblancos insisten en que debe haber una reforma en esa parte del gasto público, sin precisar cómo.
La señal más clara de la alianza tuvo lugar ayer, cuando Liberación Nacional (PLN) y Acción Ciudadana (PAC) se pusieron de acuerdo para repartirse las presidencias de las comisiones permanentes ordinarias (cuatro para Liberación y dos para el oficialismo) y se apoyaron mutuamente en las votaciones.
La confirmación del acercamiento sale de la boca del jefe de la fracción del PAC, Javier Cambronero, quien aseguró que el PLN salió más cohesionado después de la convención interna y surgió como una contraparte más sólida para negociar.
El vocero oficialista vaticinó que el acercamiento con los liberacionistas permitiría aumentar los impuestos de ventas y renta, pasando por una reforma a empleo público, pero limitada a la forma en que se evalúan a los funcionarios públicos para pagarles el plus conocido como anualidad. El gobierno torpedeó una reforma más amplia, impulsada por la oposición, a principios de este año.
"El país debe avanzar a una reforma integral, porque si no, la gente va a pagar por la vía de la inflación el alto costo de la vida. Frente a eso, la posición del PUSC y del ML es irresponsable", dijo Cambronero. El presidente Luis Guillermo Solís dijo el 3 de mayo que los impuestos urgen porque la situación fiscal es frágil y podría detonar en un aumento de las tasas de interés en los bancos.
El jefe del PAC añadió que la cercanía entre su partido y Liberación es la que ha permitido, en los últimos dos años, que se generen más acuerdos.
La vocera liberacionista, Karla Prendas, espera que la iniciativa sobre los tributos provenga del gobierno de Luis Guillermo Solís y enfatizó que ya es hora de que se tomen decisiones en la Comisión de Hacendarios (ahora bajo control liberacionista).
"En Hacendarios nos interesa tomar decisiones, negativas o positivas, pero hay que tomarlas, y no seguir en esa charanga que se hizo el último año. Esas cosas que pasaban, no pueden seguir pasando. Hay que darle un nivel diferente a esto", comentó Prendas en relación con la época en que el foro estuvo bajo el control del PUSC, que se opuso a permitir el avance de las reformas en ventas y renta.
Juan Marín: 'dictaminar impuestos es posible'
Aunque la jefa liberacionista es moderada en su propuesta, el diputado Juan Marín, uno de los más afines al candidato liberacionista, Antonio Álvarez Desanti, arroja nuevas claves sobre la alianza PLN-Gobierno.
"Las primeras acciones sobre gobernabilidad se reflejan en estas comisiones y en las plenas. En Hacendarios también. Es un esfuerzo para construir y hacer que todo avance antes de que empiece la campaña electoral, en octubre", dijo el legislador.
Marín antepone las agendas seguridad y gasto público a la de impuestos, pero no ve lejano que se llegue a la discusión tributaria, al punto de que al menos se dictaminen los proyectos de IVA y renta en Hacendarios para dejárselos a la siguiente administración: "No da tiempo ni espacio para la aprobación en este tiempo. Pero sí es posible que se dictaminen o dejarlos listos para que sigan en el próximo gobierno".
Específicamente, los impuestos de los que se habla en el Congreso desde hace casi dos años -pero en nuevas versiones de los proyectos- son la transformación del tributo sobre las ventas en uno de valor agregado y la modificación al cobro sobre las rentas.
El primero implicaría mantener la tasa en un 13%, pero aumentar la base de bienes y servicios a los que se les cobra el tributo, entre ellos servicios turísticos, de abogados, alquileres y gimnasios; además, se cobraría una tasa del 4% del IVA a educación y salud. También se subiría el impuesto selectivo de consumo, el cual se cobra sobre artículos de lujo, como licores, cigarrillos y vehículos.
En el caso del impuesto de renta, se propone incluir una tarifa del 12% a las ganancias de capital, es decir, a las que se generan mediante inversiones como compra de bonos o acciones, que actualmente, es de un 8%. En el pasado, el gobierno también habló de subir la tasa de impuesto a los salarios más altos. Hoy la tasa máxima es un 15%.
La jefa del PLN, Karla Prendas, en tanto, no quiere salirse de la línea partidaria, y le lanza la pelota al Poder Ejecutivo, para que haga propuestas específicas en pos de avanzar en los debates de impuestos, pero también en planes de seguridad e infraestructura.
El guiño también tiene tintes fiscales, pues la verdiblanca posiciona al PLN como la fracción más seria para negociar.
"Vamos a hacer la apertura para hablar de la situación fiscal del país. No es una ocurrencia hablar de contención del gasto, de empleo público y, por supuesto, de impuestos. Un verdadero abordaje es empleo público, regla fiscal, impuestos, con definiciones claras y concretas para la contención del gasto, ese es el universo ideal", reconoció Prendas.
Los consensos les toca armarlos al Gobierno y a sus diputados, que ya desde hace una semana ejercen como agentes libres de negociación y quienes encontraron a sus aliados naturales en los liberacionistas.
La repartición de puestos en comisiones, que dio pie para la alianza PAC-PLN, se gestó luego de que Liberación colocara como presidente legislativo al evangélico Gonzalo Ramírez, de Renovación Costarricense.
La alianza para repartir las comisiones surgió como posibilidad desde el 1.º de mayo y se empezó a consolidar hace poco más de una semana, cuando en el PAC se determinó que cada quien haría los conectes libremente, para apoyar o recibir apoyos en las comisiones ordinarias.
Es así como Henry Mora afirmó que él y Marcela Guerrero apoyaban a la liberacionista Paulina Ramírez para presidir Hacendarios; que el verdiblanco Juan Marín postuló a Víctor Morales Zapata (PAC) para jefear Económicos, y que el PLN apoyara en Sociales a Emilia Molina (PAC) como secretaria, además de darle a ella la presidencia de la Comisión Legislativa Plena Tercera.
Para Víctor Morales Zapata, nuevos vientos soplan en los alrededores de Cuesta de Moras, al punto que este nuevo ambiente permitió una conformación de comisiones de la mano del PAC y el PLN, pero que también implicará establecer una agenda con todos los partidos políticos.
Incluso, Morales profetizó la discusión sobre empleo público bajo una nueva perspectiva, amén del proyecto sobre regla fiscal y los de IVA y renta.
"La conformación de comisiones, más que alianzas particulares, refleja una situación anímica nueva para encontrar puntos de agenda en diferentes comisiones. (...) Hay un nuevo ambiente a nivel legislativo. Sobre el tema fiscal, creo que ese ambiente se refleja en que hay una mayoritaria conciencia de que se debe resolver el tema fiscal. Donde está el desafío es ver de qué forma lo vamos construyendo", dijo Morales Zapata.
El legislador, el más cercano al presidente Luis Guillermo Solís, fue designado como presidente de la Comisión de Económicos por aclamación, o sea, con una votación unánime de los nueve miembros de ese órgano parlamentario.
Morales cree que la forma de aprovechar ese nuevo ambiente es ir moviendo los proyectos, tanto de impuestos como regla fiscal y empleo público, en subcomisiones cuyo ritmo no llegue a crispar el desempeño en el Congreso.