
El principal objetivo del Gobierno en sus cuatro años es lograr sacar de la pobreza al menos a 180.000 personas, según el Plan Nacional de Desarrollo (PND) presentado anoche en el Teatro Nacional.
Esos 180.000 habitantes, unas 32.000 familias, representan los cuatro puntos porcentuales que la administración de Óscar Arias pretende recortar a la cuota de gente pobre, antes del 8 de mayo del 2010, cuando termina.
Para lograr su “gran meta nacional”, el Gobierno debería otorgar las condiciones para que esas 180.000 personas vivan con más de ¢43.340 mensuales si viven en la ciudad, o ¢34.665 si viven en el campo. Solo con esa suma pueden satisfacer sus necesidades básicas, según la medición oficial.
Solo así el porcentaje de pobreza en Costa Rica pasaría del 20,2% actual a cerca de un 16%, un objetivo igual al que infructuosamente se fijó Abel Pacheco en su PND, en setiembre del 2002, cuando iniciaba su gestión.
Aunque la propuesta la planteó Arias durante su campaña, ahora la fija en el PND como objetivo máximo, engarzada con programas que ya se están ejecutando y con leyes aún pendientes.
“El fin último es poner las bases para que la próxima generación de costarricenses vivan en un país desarrollado. Pero dentro de eso, la tarea más urgente es reducir la pobreza y la desigualdad”, argumentó Kevin Casas, ministro de Planificación y coordinador del Plan.
La pretensión con la reducción de la desigualdad, sin embargo, se limita a detener su incremento, según el PND. Esto porque el problema es más complejo y lo componen factores ajenos al control gubernamental, según Casas.
Entramado. El PND recoge los planteamientos que Arias promocionó en su campaña política, hace 11 meses. Lo presentó anoche ordenados en cinco ejes y 16 sectores, entre los que la política social y productiva son prioridad.
El Plan ratifica la intención de que la economía del país crezca un 6% en cada uno de estos cuatro años, para generar empleos.
Aunque en la campaña electoral se habló de 60.000 trabajos nuevos cada año, el PND omite detallar la meta laboral y solo habla de reducir la tasa de desempleo, del 6% actual a un 5%.
El presidente Arias aseguró a que este Plan de Desarrollo es realista, a diferencia de los de administraciones anteriores, a pesar de que los gobernantes de turno insistían en su viabilidad.
“Padecieron el mal de la exuberancia de las intenciones, del exceso de acciones y la consecuente ausencia de prioridades. El Plan se convirtió en un documento tan extenso, que ni siquiera se mandaba a imprimir, y tan complejo, que ningún ciudadano era capaz de entenderlo”, dijo Arias en el acto de presentación.
Una diferencia entre el programa de Gobierno y el Plan atañe a la reforma de instituciones del Estado. Antes se hablaba de fundir algunas entidades y cerrar otras, pero ahora se optó por cambiar los procedimientos, sin tener que variar la maraña legal del sector público.
Mejores calles. Otra meta prioritaria para el este Gobierno es incrementar en un 50% los kilómetros de carretera que ahora están en buen estado, de manera que en el 2010 el 30% de la red vial esté bueno. Actualmente es un 20%, según la ministra de Obras Públicas y Transportes, Karla González.
La calidad de las calles es clave en el tema de infraestructura, en el que también destacan la modernización de los puertos del Caribe, que se procura dar en concesión.
La reforma a la Ley de Concesión de obra pública , actualmente en trámite legislativo, es un ejemplo de las metas incluidas en el PND que dependen de su suerte en la Asamblea Legislativa.
Otros puntos considerados claves son la aprobación del paquete de leyes tributarias, el impulso de programas para pequeñas y medianas empresas y la eventual aplicación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, así como el fin del monopolio estatal en seguros y telecomunicaciones.