La Haya. AP. Unos 50 países reforzaron ayer en La Haya las medidas destinadas a impedir que terroristas puedan acceder a material nuclear que les permita fabricar una bomba capaz de diseminar sustancias radiactivas.
En la conferencia de prensa de cierre de esta tercera edición de la Cumbre de Seguridad Nuclear (NSS), el presidente estadounidense, Barack Obama, aplaudió los esfuerzos realizados y animó a los dirigentes del mundo entero a cooperar estrechamente para contrarrestar la amenaza del terrorismo nuclear, el cual califica de la “amenaza más inmediata y más extrema para la seguridad mundial”.
“Es esencial que no nos relajemos y que aceleremos nuestros esfuerzos en los próximos dos años, que mantengamos el impulso para acabar por todo lo alto en el 2016”, durante la próxima edición de la cumbre en Washington, añadió.
Para el primer ministro holandés, Mark Rutte, se han adoptado “medidas importantes” sobre los tres objetivos de la cumbre: reducir el número de materiales nucleares peligrosos, mejorar la seguridad de estos materiales y mejorar la cooperación internacional.
Algunos Estados han querido ir más rápido que otros y 35 de los 53 países que participan en la cumbre, se comprometieron a aplicar estándares internacionales más estrictos que los adoptados en el comunicado final.
La iniciativa, lanzada por Estados Unidos, Holanda y Corea del Sur, la suscribieron 32 países más, entre ellos Francia, Turquía, Israel y Ucrania.
Chile y México también lo hicieron, pero no así Argentina y Brasil. Estos son los cuatro países de América Latina que participron en la cumbre. China y Rusia tampoco rubricaron el documento.
Esto representa “el avance más importante de la cumbre”, comentó Miles Pomper, experto del centro James Martin para Estudios sobre la No Proliferación. Sin embargo, “sería necesario que la totalidad de los países que participan de la cumbre firmen también este texto”.
Según el Grupo sobre Materiales Fisibles, un grupo de expertos sobre la energía nuclear, “la ausencia de Rusia, de China, de Pakistán y de India, todos ellos países con el arma nuclear y un stock importante de materiales nucleares, debilita el impacto de este texto”.