Río de Janeiro. AFP. El jefe del Ejército brasileño alertó de que la creciente tensión política que vive el mayor país de Latinoamérica, podría llevar a una “crisis social”, según declaraciones publicadas este miércoles por el diario Folha de São Paulo .
El general Eduardo Villas Boas lanzó su aviso en una videoconferencia con 2.000 oficiales de la reserva el viernes, según la información de Folha.
“Estamos viviendo una situación extremadamente difícil, crítica, una crisis de naturaleza política, económica, ética muy seria y con preocupación de que, si continúa, pueda transformarse en una crisis social con efectos negativos sobre la estabilidad”, manifestó.
Aunque Villas Boas, quien fue designado por la ahora asediada presidenta Dilma Rousseff a comienzo de año, añadió que las instituciones están funcionando correctamente.
Pese a que se produjeron el viernes, las inhabituales declaraciones del general solo se hicieron públicas ahora y despertaron un gran interés en los medios digitales.
Brasil restableció su democracia en 1985 tras 21 años de la dictadura militar que comenzó en 1964 con un golpe de Estado. Tres décadas después, la sociedad brasileña sigue muy sensible ante la posible injerencia del Ejército en la esfera política.
La propia Rousseff –de 67 años y quien lucha ahora por alejar la amenaza del juicio político reclamado por la oposición , luego de que una auditoría considerara que las cuentas públicas fueron maquilladas– fue encarcelada y torturada durante la dictadura por formar parte de una guerrilla izquierdista.
Durante un acto sindical este martes en São Paulo, y escoltada por el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva y el exmandatario uruguayo José Mujica, Rousseff alertó de la naturaleza de las acciones políticas que buscan destituirla.
“Hay una búsqueda incesante de la oposición de acortar su camino al poder, de dar un salto y llegar al Gobierno dando un golpe”, dijo Villas Boas.
Además de la compleja situación política, el país que acogerá los Juegos Olímpicos del próximo año atraviesa una preocupante crisis económica, que se combina con el mayor escándalo de corrupción de su historia que expolió a la estatal Petrobras.